Alerta ante el ciberacoso
El uso de la tecnología ha generado que aumente el ciberacoso, es decir, aquella intimidación en redes sociales, plataformas de mensajería o videojuegos, con el fin de atemorizar, enfadar o humillar.
Lo más común, describe la Unicef, es que se difundan mentiras, se publiquen fotos o videos vergonzosos; que se envíen mensajes, imágenes o videos hirientes o amenazantes.
"El acoso cara a cara y el ciberacoso ocurren juntos, a menudo. El ciberacoso deja huella digital: un registro que sirve de prueba para ayudar a detener el abuso".
Twitter, junto con la organización Grooming Argentina, elaboró una serie de consejos para quienes ingresan a su plataforma, pero aplica para el ciberbullying en general.
Los adultos deben saber el uso que sus hijos le dan a la tecnología. "Explícales cómo usar las plataformas digitales y habla de los riesgos de interactuar con desconocidos", sugiere.
Adviérteles que no deben compartir información personal ni aceptar solicitudes o mensajes de desconocidos y que deben cuidar de su privacidad.
Al manifestarles tu apoyo, refuerzas la importancia de pedir ayuda ante la más mínima amenaza.
También céntrate en hacerle saber que le escuchas y apoyas; que sepa que no fue su culpa. Sobre todo dile que le crees, que te alegras de que lo haya contado e inmediatamente habla con su profesor o el responsable de la escuela sobre la situación. También pregunta si la institución cuenta con una política o código de conducta contra el acoso.