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Ismael dirigió entre crisis, pandemia y recortes

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Ismael dirigió entre crisis, pandemia y recortes

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JUAN MANUEL CÁRDENAS

Ismael Hernández Deras entregó la estafeta de la dirigencia de la organización campesina más grande e importante del país, tras cuatro años de enfrentar la crisis más aguda por la que ha atravesado el sector por el recorte de programas de apoyo, los estragos climáticos y la pandemia de Covid-19, consolidándose como un político referente a nivel nacional.

El ahora exdirigente campesino asumió la dirigencia de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en el año 2018, prácticamente a la par del inicio de la actual Administración Federal; desde entonces, afrontó las intenciones gubernamentales de mermar los apoyos al campo, con el que de por sí existe ya una deuda histórica del país.

Por ejemplo, todavía en el año 2018 se destinaron 73 mil 817 millones de pesos al campo; pero en este año 2022, el recurso ascendió a 53 mil 89 millones de pesos. Lo que representó una reducción del 40 por ciento en esos cuatro años. A la par, la Federación eliminó fideicomisos como el Fondo de la Financiera Rural, el de investigación en materia agrícola, el del cambio climático y el de desastres naturales, entre otros.

La ola de la "Cuarta Transformación" también desapareció los apoyos productivos para el campo, apoyos para proyectos productivos de las mujeres y apoyos para proyectos juveniles. El crédito a productores se disparó de tasas de entre el seis y siete por ciento, al 17 y 18 por ciento. Por consecuencia, se han dejado de sembrar a nivel nacional cerca de cuatro millones de hectáreas.

Bajo estas circunstancias, Ismel Hernández Deras afrontó las políticas federales que representaron un retroceso para el sector agropecuario. En diversas ocasiones subió incluso a la tribuna de la Cámara de Diputados para con los legisladores federales que le dieron la espalda a los campesinos de México, quienes no se dieron cuenta de que ya no hay subsidios ni fomentos agrícolas, ganaderos, pesqueros y acuícolas. Considerando también que los precios de los insumos agrícolas se incrementaron y los precios de los fertilizantes aumentaron hasta un 300 por ciento.

Es decir, los costos para los pequeños productores se incrementaron pero los precios de sus cosechas se siguen pagando a los mismos precios, cuestión que vuelve incosteable sembrar la tierra. De igual forma, el Gobierno Federal ignora que esto está desincentivando la actividad del campo para las nuevas generaciones, las cuales optan por emigrar a las urbes para estudiar profesiones que puedan ser más costeables y con más oportunidades. La soberanía alimentaria de México está en más riesgo que nunca.

Ante todas estas adversidades, en diciembre del año 2018 Hernández Deras solicitó por escrito permitir el acceso de campesinos al Congreso de la Unión; pero ante el desdén de la presidencia de la Cámara de Diputados, acompañado de legisladores cenecistas, abrió las puertas para que los campesinos entraran y que se escuchara su voz.

Con esta pugna, la Secretaría de Agricultura les recuperó ocho mil millones de pesos de recursos para el campo. Posteriormente, Ismael presentó diversas iniciativas para personas dedicadas al campo, como la Ley de Agricultura Familiar. Por unanimidad, los diputados federales aprobaron otra propuesta enfocada en las mujeres rurales, que garantiza la paridad en los comisariados ejidales.

Durante el evento en el que Ismael Hernández rindió su último informe como dirigente de la CNC, cargo que recaerá en Leticia Barrera Maldonado por los próximos cuatro años, se le vio tranquilo y confiado en que además de la pugna que realizó por el sector campesino durante su gestión, demostró el poder que los productores agrícolas y pecuarios tienen todavía en el país.

Otro ejemplo, durante las elecciones presidenciales del año 2018, de las 7 mil 041 casillas que ganó el candidato priista José Antonio Meade, el 85 por ciento fue en casillas ubicadas en el medio rural. Mientras que para el año 2019, en las elecciones para Presidentes Municipales, de los 39 Ayuntamientos de Durango, el PRI triunfó casi en la mitad con el apoyo del voto rural, producto del trabajo en territorio de las bases campesinas.

Más recientemente, el apoyo de Hernández Deras fue fundamental en la coalición con la que se ganó la gubernatura de Durango, con Esteban Villegas Villarreal como punta de lanza, así como 20 de los 39 municipios, en los que habita más del 80 por ciento de la población del estado.

Fueron más de 800 giras de trabajo las que Ismael realizó a lo largo y ancho del país; cientos de miles de kilómetros recorridos a lo largo de cuatro años, para visitar más de 500 municipios de México, donde encabezó más de 10 mil reuniones de trabajo en busca de mejores condiciones de vida para el sector más castigado de los últimos años.

Escrito en: OPINIÓN Ismael, cuatro, Hernández, Deras

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