
Niños emprendedores: una realidad
Se suele relacionar la palabra emprendimiento con un proyecto de negocio o financiero, pero en realidad, significa empezar algo. Puede ser de carácter deportivo, artístico, cultural, educativo, etc. De ahí que cualquier tipo de persona, incluyendo los niños, pueden convertirse en emprendedores.
María del Carmen Cabrera Cisneros, presidenta y fundadora de Business Kids, explica que no existen características o aptitudes específicas para lograr que los pequeños sean emprendedores, ya que todos tienen la capacidad de lograrlo, pero sí se necesita de ciertas herramientas que ayuden a potencializar las características que cada niño o niña posee de acuerdo a sus intereses.
"El emprendimiento no es algo de personalidad o aptitud como en los deportistas, por ejemplo, que necesitan tener resistencia física. Todos podemos ser emprendedores; hay que entender que esto no solamente se trata de poner un negocio, sino de empezar algo nuevo. El punto es potencializar las competencias como son proactividad, autorresponsabilidad, capacidad de trabajar en equipo, persuasión y negociación, planeación y organización, que están relacionadas con las funciones ejecutivas en el cerebro del niño y que le van ayudar como un aprendizaje de vida", indica Cabrera Cisneros. Estas competencias también van a contribuir a que el niño tenga un mejor desempeño escolar, mayor confianza en sí mismo y, por ende, habrá menos probabilidades de que sea víctima de bullying; y se potencializan para que pueda llegar a ser un emprendedor, pero no necesariamente en un tema de negocios, sino en cualquier área que le apasione.
EL PAPEL DE LOS PADRES
Y, aunque los papás juegan un papel muy importante en la formación de los infantes apoyándolos y motivándolos a tomar sus propias decisiones, se requiere que expertos en el tema lleven a cabo el coaching ya que muchas veces pueden terminar ejerciendo una presión innecesaria que acaba por desalentar los sueños de los pequeños.
"Muchos se equivocan, les exigen mucho, pero no aplauden lo que van logrando. Tal vez un niño no logra lo que el papá quisiera que en las calificaciones o hasta haciendo un dibujo y quiere motivar a que no se conforme, pero lo desalienta".
Cabrera Cisneros enfatiza en la relevancia de que los padres crean en el emprendimiento infantil, el cual también es una manera de preparar al niño para un futuro en el que él tendrá que buscar sus propios recursos. Al mismo tiempo insiste en respaldar y validar las actividades que les apasionen y apoyar los sueños que tienen los chiquitos para que sea más fácil transitar al camino del éxito.
INCERTIDUMBRE Y MÁS
Cuando los papás son emprendedores, el niño va a tener a su favor ciertas experiencias que le servirán para cuando él decida comenzar su propio proyecto.
Una de las más importantes es que sabrá manejar la incertidumbre, aquellas situaciones en la que tenga poca o cero información para tomar decisiones. Esto le ayudará a resolver de una mejor forma los problemas que se le presenten.
Además de la incertidumbre, es trascendental explicarles que el fracaso no es algo malo, sino una oportunidad para mejorar aquellas cosas que no salieron bien la primera vez.
Otras recomendaciones que hacen los expertos en el tema son:
- Permitir que tomen sus propias decisiones.
- Acceder a que decidan qué ropa es la que quieren usar.
- Dejar que resuelvan solos problemas sencillos.
- Permitir que asuman riesgos.
- Estimular su creatividad.
- Escuchar y respetar sus ideas.
- No dejarlo ganar en todo.
- Fomentar su curiosidad.
- Incentivar el trabajo en equipo.
- Inculcar la disciplina y organización.