Efectivo. El regaliz se considera uno de los mejores remedios para las úlceras y la acidez de estómago. Pero también puede ocasionar problemas si se toma en exceso.
La gastritis suele ser más propensa entre los 20 y 55 años, y en mujeres más que en hombres.
Puedes probar estas infusiones para encontrar alivio:
MANZANILLA
La manzanilla, también conocida como camomila, es una de las flores más reconocidas del herbario popular y la opción más elegida al momento de calmar la gastritis.
Es un tratamiento tradicional para los problemas digestivos, incluyendo las náuseas, gases o gastritis. Posiblemente, sus bondades se deben a la presencia de compuestos con efectos antiinflamatorios, como terpenoides o flavonoides.
BOLDO
El boldo (Peumus boldus), suele ser muy elegido cuando se busca conectar la cena con la cama, especialmente en regiones de América del Sur. Sin embargo, esta hierba también posee propiedades digestivas.
Según los expertos, es eficaz gracias a uno de sus compuestos característicos, la boldina, al que adjudican propiedad antioxidantes y antiinflamatorias.
Su consumo también se recomienda para prevenir la diarrea o estreñimiento, limpiar de toxinas el organismo y desinflamar o deshinchar el estómago, ya que protege la mucosa gástrica.
REGALIZ
Además de un aspecto peculiar, el regaliz (Glycyrrhiza glabra), licorice, orosús, palo duz, regalicia o palodú se destaca por su dulce sabor.
El regaliz también posee muchos efectos beneficiosos, especialmente cuando de digestión se trata, ya que es rico en flavonoides, vitaminas, hierro, magnesio, potasio, zinc y fitonutrientes esenciales, como timol, fenol, o quercetina.
Por ello, se recomienda beberlo en infusiones para calmar la gastritis, acidez, o úlceras estomacales. Solo debes lavar muy bien la raíz de regaliz y trozar finas rodajas hasta completar una cucharada e infusionar en 250 ml de agua. Deja reposar y bebe tibio para no dañar la mucosa gástrica.
JENGIBRE Y CARDAMOMO
El jengibre y el cardamomo son parientes, ya que pertenecen a la familia Zingiberáceas. Del primero se aprovecha su rizoma (tallo horizontal subterráneo) porque tiene un aroma fresco, sabor picante y muchas propiedades saludables.
Aunque puedes consumirlo para calmar la gastritis a partir de infusiones (utilizando su ralladura o la variante molida), algunos especialistas aseguran que beberlo fresco en batidos con otros vegetales o frutas, como apio, manzana o zanahoria, ayuda a prevenir náuseas y acidez.
El cardamomo puede encontrarse en forma de semilla o polvo, con las que se prepara intensas infusiones. Tiene propiedades antiácidas, antiinflamatorias y protectoras de la mucosa gástrica, por lo que los investigadores suelen señalarlo como una gran opción para aliviar la gastritis.