Delegado de Bienestar en Durango guarda silencio, acusan productores que exigen pagos
Este miércoles se cumple una semana desde el cierre de la delegación del Bienestar en Durango, realizado por productores del programa Sembrando Vida de varios municipios, debido a un adeudo de 1.7 millones de pesos. Beneficiarios del Mezquital denuncian que los técnicos de este programa les retienen el 50% de los pagos.
José Enrique Andrade Mendoza, beneficiario del programa en el municipio de Pueblo Nuevo, expresó que parece no interesarle al delegado de esta dependencia dar la cara y responder a los productores que llevan un año sin recibir el pago correspondiente.
“Tenemos un año sin pago y el delegado, en lugar de resolver, cerró su oficina y se fue a los pueblos para culpar a los productores de la falta de registro en otros programas”, comentó.
Andrade Mendoza explicó que el delegado ha estado culpando a los productores de que no se puedan realizar trámites en la delegación debido al cierre. Sin embargo, afirmó que habría sido más sencillo enfrentar la situación el mismo día del cierre y llegar a un acuerdo.
“En vez de eso, prefirió irse, abandonar la delegación y evitar dar la cara”, agregó.
Antecedente
Julián Labrador Aragón, otro productor que participa en la manifestación, comentó que anteriormente los pagos se realizaban con normalidad, pero desde que cambiaron las tarjetas comenzaron los problemas.
Reconocieron que hubo un error con las firmas, el cual se corrigió de inmediato; no obstante, los pagos siguen sin llegar. “Ya van 11 meses de atraso, y las deudas no dejan de acumularse”, señaló Labrador Aragón.
“Nosotros ya estamos endeudados por mantener nuestras siembras de árboles. Todo lo que nos paguen se destinará directamente a saldar las deudas que tenemos”, añadió.
El martes por la mañana, productores del municipio de Mezquital se sumaron a la protesta, denunciando además que los técnicos del programa Sembrando Vida les exigen dinero para inscribirlos y darlos de alta en el programa.
“Les piden la mitad de lo que reciben en sus primeros pagos, y si el productor se niega, los amenazan con darlos de baja”, denunció Jesús García, quien añadió que esta situación ocurre en la comunidad de El Duraznito.