
Contenido. Debajo del obelisco se encuentra una sala de interpretación que podrá ser visitada en seis meses.
La sala de interpretación que se encuentra debajo del monumento a Guadalupe Victoria, y que se había convertido en una bodega por años, va a ser rescatada para abrirse al público y que pueda ser un espacio turístico.
Será en unos seis meses que pueda quedar habilitado este espacio, que es poco conocido por los propios duranguenses y que forma parte de la rehabilitación del patrimonio histórico de Durango.
El regidor Antonio Morales reconoció que se tiene un gran reto en el Ayuntamiento, para proteger y rescatar todo el patrimonio histórico del munipio, pero se hará en coordinación con el Gobierno del Estado, para hacer una mezcla de recursos.
La sala de interpretación, en el obelisco a Guadalupe Victoria, era una bodega de Servicios Públicos, pero se convertirá en un espacio importante como lo merece, para reconocer al primer presidente de México, enfatizó.
Se podrá recibir a invitados de otros continentes, con promoción turística para el lugar. Junto con este rescate se hará también el de la Casa Colorada, abundó.
"Logramos un millón de pesos para rescatar la Casa Colorada, que está a un costado de la Iglesia San Juan Bautista, en el Barrio de Analco".
Solo falta ponernos de acuerdo para cuidar las obras, no solo por los turistas, sino por toda la ciudadanía, que incluso son quienes han dañado algunos monumentos, lamentó.
Javier Guerrero Romero, cronista e historiador, había comentado que se cuenta con más de 500 bienes inmuebles en la capital, entre monumentos, edificios, casas y murales de valor histórico.