Triunfador. Diego San Román salió a hombros de la Plaza de Toros Alejandra, donde cortó 4 orejas y un rabo.
El diestro queretano cortó 4 orejas y un rabo en la Plaza de Toros Alejandra.
La tarde del primer día del año fue mágica en la Plaza de Toros Alejandra, donde el torero Diego San Román escribió un poema, con una faena redonda a Don Armando, el sexto de la Tradicional Corrida de Año Nuevo, donde el queretano salió a hombros al cortar 4 orejas y un rabo.
Y es que la tarde reservó lo mejor para el final, donde se recordó al empresario taurino Armando Guadiana Tijerina, quien falleciera hace unos días. Y, seguramente, para los amantes de la tauromaquia será un día para recordar, pues la presentación de Diego dejó un grato sabor, con un toreo de verdad, donde a su primero Muzquiz de 470 kilos le cortó dos orejas y, a su segundo, ambas orejas y el rabo; Guillermo Hermoso de Mendoza se llevó tres apédices, mientras que Israel Téllez cortó dos.
Homenaje
La fiesta inició con un minuto de aplausos en honor a Armando Guadiana Tijerina, además de que se explicó que todos los toros llevarían nombres alusivos a su persona.
Guillermo
El primero en saltar al ruedo fue Guillermo Hermoso de Mendoza, quien se mostró por primera vez ante el público duranguense, pintando buenos trazos al lomo de sus caballos de la misma calidad que los de su padre, la leyenda del rejoneo, Pablo Hermoso de Mendoza.
Una a una, fue poniendo las banderillas e incluso llegó a poner un par con las manos en lo alto y soltando el mando de su equino, suerte que fue muy aplaudida por el respetable, además de que con el rejón de muerte estuvo acertado terminando así con Senador de 460 kilos, a quien le cortó una oreja cedida por el público y otorgada por el Juez de Plaza, Humberto Villarreal.
En su segundo y cuarto de la tarde, Guillermo se mostró más suelto y tuvo mejores momentos. La gente se prendió cuando Hermoso de Mendoza empezó a realizar más suertes al ritmo del Corrido de Durango.
Ingeniero de 470 kilos fue un toro que respondió y que mostró condiciones para seguir a los caballos de Guillermo, cosa que el rejoneador aprovechó a la perfección y cuando se tiró a matar, confirmó sus dos orejas, las cuales ya tenía en la bolsa antes de la espada mortal.
Israel
El diestro guanajuatense volvió a la Plaza Alejandra, luego de haberla visitado en el 2020, así que, ya conocido por la afición, salió a demostrar su evolución en estos años y dio una buena faena ante Buen Amigo, de 465 kilos, un astado con buena presencia, que incluso derribó al caballo del picador.
Israel cubrió el segundo tercio a petición del público y lo hizo de gran manera, incluso su tercer par lo ejecutó al violín, con lo que se echó al público a la bolsa.
Realizó una buena faena con momentos de hinojos y con desplantes que emocionaron a los presentes, rematando con una buena estocada que hizo doblar pronto a Buen Amigo y que le valió dos orejas.
Pero la suerte no fue la mejor en su segundo de la tarde, Ganadero de 458 kilos, que a pesar de tener buen recorrido, a la hora de la verdad dejó ir los trofeos. Una estocada trasera y caída no fue suficiente y solo recibió palmas del respetable.
Diego
El tercero de la tarde, Muzquiz, de 440 kilos, fue para Diego San Román, quien en su presentación en esta plaza supo lucir y dejar en claro su momento, con un toreo quieto y de mucha cercanía, que le fue reconocido por los duranguenses.
Una raena en redondo con buenos muletazos y una estocada hasta la empuñadura le dieron al queretano sus dos primeras orejas.
Pero lo mejor llegó en el último de la tarde de nombre Don Armando, de 464 kilos, un toro que embestía con gran poder y que tenía recorrido, al cual San Román supo llevar en una coreografía perfecta que levantó a todos de sus asientos.
Pegado a Don Armando, Diego, vestido de turquesa, le habló al oído, lo llevó por donde quiso, le sedujo, a él y a todos los asistentes que, a una voz, recitaron los olés, fue una sentida faena de olés interminables, de dos cómplices que escribieron un poema de amor y muerte esta noche.
La estocada no pudo ser mejor y el público pidió orejas y rabo y el Juez las concedió, además de arrastre lento a Don Armando, que no se pudo despedir de mejor manera del Coso de la San Martín.
Diego San Román
Fue el triunfador de la Corrida de Año Nuevo cortando 4 orejas y un rabo en la Plaza de Toros Alejandra.
Guillermo Hermoso
Tuvo una buena presentación en la Alejandra, dejando buenos momentos y llevándose 3 orejas.
Israel Téllez
La espada le impidió llevarse más apéndices de la Corrida de AÑo Nuevo, pero se llevó el reconocimiento del público.
