
Arquidiócesis de Durango se unió a la condena de 'masacre' en Guanajuato
La Arquidiócesis de Durango se unió a la condena de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) en torno a la masacre de jóvenes en San Bartolo de Berrios, San Felipe, Guanajuato.
En tal sentido, la Arquidiócesis local difundió el comunicado del CEM en torno a este hecho que dejó sin vida a siete jóvenes, entre ellos algunos menores de edad, que fueron asesinados en la plaza principal del pueblo el pasado 19 de mayo.
“Como pastores del Pueblo de Dios no podemos permanecer indiferentes ante el espiral de violencia que lacera a tantas comunidades de nuestro país. Esta masacre, una más entre tantas que se repiten con dolorosa frecuencia, es un signo alarmante del debilitamiento del tejido social, la impunidad, y la ausencia de paz en vastas regiones de nuestra nación”.
Ante ello, se hizo un llamado urgente a las autoridades de todos los niveles, “para que asuman con responsabilidad y eficacia la tarea de garantizar la seguridad y la justicia. No podemos acostumbrarnos a convivir con la muerte violentan, ni permitir que la impunidad se convierta en norma”.
Asimismo, se hizo un llamado a la sociedad civil “para que no caigamos en la indiferencia ni en la desesperanza. Es tiempo de construir juntos la paz desde lo cotidiano, desde nuestras familias, comunidades y espacios de participación. La violencia no se erradica solo con el uso de la fuerza, sino con profunda transformación cultural que recupere el valor sagrado de la vida humana. Denunciamos toda forma de violencia y reiteramos que el diálogo y la justicia son los únicos caminos para la construcción de una sociedad de paz”.
Asimismo, se exhortó a las comunidades eclesiales a ser lugares de paz donde se anuncie que “el mal no tiene la última palabra”.