
Expectativa. Las cifras indican que este año podría elevarse el número de personas que fueron picadas por un alacrán y que requirieron que se les aplicara el suero antialacránico.
En Durango, durante los primeros siete meses y medio de este año, los casos de intoxicación por picadura de alacrán atendidos en instituciones de salud se incrementaron en 9.6 por ciento respecto al mismo periodo de 2024.
Al cierre de la semana epidemiológica 33 (del 10 al 16 de agosto) se confirmaron siete mil 740 personas intoxicadas tras la picadura de este arácnido, quienes requirieron al menos una dosis de suero antialacránico.
Del total de pacientes, 53 por ciento son varones, en su mayoría con edades entre 24 y 44 años. Los municipios con mayor incidencia de intoxicados son Durango (principalmente la zona urbana), Mezquital, Nombre de Dios y Poanas, entre otros.
La cifra representa un 9.6 por ciento más que los registros del mismo periodo de 2024. En ese año se contabilizaron nueve mil 100 casos en total, mientras que en 2023 fueron ocho mil 974, lo que reflejó entonces un crecimiento apenas del 1.1 por ciento.
De mantenerse la tendencia actual, no se descarta que al cierre de 2025 los casos superen los 10 mil, lo que significaría un repunte considerable en la incidencia de intoxicaciones por picadura de alacrán en la entidad.
Los datos del boletín epidemiológico se refieren a las personas a las que se les tuvo que aplicar alguna ampolleta de suero antialacránico, pero hubo miles de personas más que acudieron a un centro de salud, hospital o clínica picadas por un alacrán, pero el veneno no les hizo efecto y no fue necesario aplicarles el suero.