
Hazaña. De manera inesperada y sin complicaciones, la novena duranguense humilló sin problemas al segundo de la tabla.
La novena de Caliente de Durango completó la barrida ante Tecos de los Dos Laredos al imponerse por pizarra de 5-1 en el tercer juego de la serie disputado en el Parque La Junta. Con este resultado, los duranguenses hilvanaron su cuarta victoria consecutiva, en uno de los eventos que podrían marcar un punto de inflexión en su temporada.
El duelo comenzó con dominio visitante desde el primer episodio, cuando José Álvarez y Rubén Tejada se embasaron con sencillos consecutivos. Un lanzamiento descontrolado permitió avanzar a los corredores, y poco después, Víctor Márquez impulsó la primera carrera con otro imparable para poner la pizarra 1-0.
Aunque Tecos logró empatar en la segunda entrada con sencillo productor de Harold Ramírez para recortar distancias, los duranguenses respondieron de inmediato en el tercer rollo, con Oswaldo Arcia conectando doblete y Sabriel Polanco remolcando la segunda rayita con sencillo, devolviendo la ventaja a los visitantes por 2-1
La ofensiva duranguense mantuvo la presión en la cuarta entrada, aprovechando un error defensivo para ampliar la diferencia a 3-1. En la sexta, Randy Romero negoció pasaporte y se robó la segunda base, lo que abrió la puerta para que Arcia lo remolcara con sencillo al central, colocando el marcador 4-1.
La última anotación llegó en el séptimo episodio: Ali Castillo abrió con doblete, avanzó a tercera por lanzamiento descontrolado y anotó posteriormente por otro envío desviado del lanzador Manuel Chávez, sellando el triunfo con el 5-1 definitivo.
En la lomita, Jorge García cumplió con una labor sólida, mientras que el bullpen mantuvo a raya a los Tecos en los innings finales. La defensiva también respondió en momentos clave, incluyendo un doble play en la novena baja que apagó cualquier intento de reacción local.
BOCANADA DE AIRE
Con esta victoria, Caliente de Durango no solo se llevó la serie por limpia, sino que también dejó atrás una etapa complicada marcada por resultados adversos. La novena dirigida por Ramón "Potrillo" Valdez mostró señales claras de recuperación, equilibrando ofensiva y pitcheo, y recuperando el ímpetu necesario para mantenerse competitiva en la recta final de la campaña.