Nosotros

CARIÑOTERAPIA

La vida se camina con amigas, los hombres van y vienen...

La vida se camina con amigas, los hombres van y vienen...

La vida se camina con amigas, los hombres van y vienen...

VANESSA BARDÁN PUENTE

Hay una verdad universal que tarde o temprano descubrimos: los hombres pueden ser capítulos, pero las amigas son toda la saga completa.

Desde la infancia hasta la adultez, las amigas son esas cómplices que te acompañan en las locuras, te sostienen en las tragedias y celebran contigo los pequeños milagros de la vida, desde el nacimiento de tu hijo, que te cierren unos jeans o la aparición de tus primeras canas.

No es que los hombres no importen, ¡claro que importan!, amor, chispa y hasta historias inolvidables, pero, ellos entran y salen de escena, algunos como estrellas fugaces, otros como huracanes... a veces entran y salen como pasajeros en una estación.

Las amigas, en cambio, se quedan en el andén, esperando para caminar contigo otro tramo. Los hombres pueden ir y venir, pero las amigas... esas se quedan en tu vida como raíces firmes y como alas dispuestas a volar contigo. No es que los hombres no sean importantes. Pero mientras ellos hacen maletas de entrada y salida, las amigas se quedan de inquilinas permanentes en tu corazón. Los novios caducan, las amigas no, los hombres pasan, las amigas se quedan...

Una amiga no solo te escucha; también te recuerda quién eres cuando el mundo (o un hombre) intenta confundirte. Con una amiga puedes llorar a mares por un desamor y, cinco minutos después, estar riendo de lo ridículo que fue que aquel "amor eterno" que ni siquiera supiera cocinar un huevo. Ellas hacen que lo dramático sea llevadero y lo cotidiano, memorable. Son ellas las que llegan con helado cuando él se va, las que conocen tus dramas y las que jamás te dejan en visto. Las amigas son tus testigos de tu evolución, saben de memoria tu biografía y aun así deciden seguir leyéndola.

Cuando caminas con amigas, no estás sola, llevas contigo las voces que te empoderan, te regañan con cariño y te impulsan a seguir. Cuando te pierdes en el drama, tu amiga aparece con Google Maps y hasta brújula emocional para recordarte el camino de regreso a ti misma. Ellas ven tu luz en momentos en que tú solo percibes sombra. Ellas son las que aparecen con consejos, abrazos o silencio, y también te dan terapia con vino incluido. La vida no siempre necesita soluciones, a veces solo necesita una noche de chicas para volver a tener fe en la humanidad.

La vida no siempre es recta, ni fácil, pero con amigas el viaje es menos pesado. Con ellas descubres que lo importante no es quién se queda o se va, sino con quién disfrutas cada paso.

Dicen que el amor mueve montañas... pero la amistad femenina mueve montañas, te carga la mochila, te da agua y hasta te toma la mejor foto para tu Instagram.

Así que sí... los romances pueden ser la chispa, pero las amigas son el fuego que te mantiene viva. La verdadera historia de amor eterno son las amigas. Olvida las películas románticas y las promesas bajo la luna, el verdadero "para siempre" se escribe entre amigas.

En un mundo que se empeña en cambiar a cada instante, donde los amores van y vienen, las amigas son la verdadera historia de amor eterno, con abrazos inesperados, secretos bien guardados, un cariño que nunca caduca y cero contratos prenupciales.

Porque al final del día, los príncipes azules pueden desteñirse, pero las amigas siempre brillan con luz propia. Porque al final, lo que permanece no son las promesas rotas ni los finales de cuento, sino esas amigas que caminan contigo, que conocen tus silencios y celebran tus sueños. Con ellas, cada día se convierte en un pedacito de eternidad, en un refugio donde siempre serás amada tal cual eres.

Escrito en: Cariñoterapia amigas, siempre, vida, pueden

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Nosotros

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas