Chespirito entre el mito y la verdad: la serie que encendió la polémica

“¡Fue sin querer queriendo!”… pero HBO encendió la polémica con su serie “Sin Querer Queriendo”, una producción de 8 capítulos que se propuso contar la historia del hombre detrás de El Chavo, el Chapulín y tantos otros personajes entrañables.

Lo que nadie se esperaba es que también reviviría viejos rencores y desencadenaría una tormenta de reacciones, en especial por parte de Florinda Meza, quien no quedó nada contenta con cómo la retrataron.

La serie, que se transmitió del 8 de junio al 24 de julio, no se limitó a contar la vida profesional de Roberto Gómez Bolaños. También abordó, de forma muy libre, según algunos, su vida amorosa, los conflictos con su elenco, la lucha por los derechos de sus personajes y hasta los momentos más oscuros detrás del set.

Uno de los puntos más discutidos fue precisamente el trato que se le dio a Florinda Meza, quien reaccionó públicamente con declaraciones tajantes. En un mensaje que compartió en redes, aseguró:

“A mí nadie me consultó, y lo que mostraron no es la verdad. Es una ficción disfrazada de biografía.”

Incluso fue más allá al señalar que “la historia fue contada para favorecer a quienes hoy controlan la marca Chespirito, pero no tienen los recuerdos reales”.

También acusó a los creadores de usar su imagen sin autorización y de tergiversar su relación con Roberto Gómez Bolaños, insinuando que la retrataron como manipuladora y ambiciosa, cuando, según sus propias palabras, “fui compañera, no sombra ni obstáculo”.

Pero más allá del drama, hay una pregunta que muchos se hicieron capítulo tras capítulo: ¿qué fue cierto y qué fue parte del guion?

Algunos eventos están basados en hechos comprobables: los desencuentros con Carlos Villagrán (Quico), las diferencias con Rubén Aguirre (el Profesor Jirafales), la censura en ciertos países o los problemas de derechos que aún hoy impiden que El Chavo del 8 se transmita en televisión abierta.

Sin embargo, otras escenas fueron claramente dramatizadas o incluso ficcionalizadas. La serie toma muchas licencias narrativas para mostrar un Chespirito vulnerable, ambicioso, enamorado, pero también controlador y obsesionado con su legado.

Lo cierto es que “Sin Querer Queriendo” no dejó a nadie indiferente: para unos fue un homenaje necesario y para otros, una reinterpretación cargada de sesgos. Pero como decía el propio Chavo… “es que no me tienen paciencia”.