Consejos para limpiar madera, acero y mármol

Mantener impecables muebles y superficies del hogar puede ser un reto, sobre todo cuando están fabricados en materiales distintos como madera, mármol o acero. Cada uno requiere cuidados específicos y productos adecuados, pues una limpieza inadecuada puede dañar su apariencia y reducir su durabilidad. Con algunos consejos prácticos, es posible conservarlos en buen estado y resistentes al paso del tiempo.

En el caso de la madera, lo más recomendable es utilizar limpiadores diseñados para este material y evitar los abrasivos. Los paños de microfibra son aliados indispensables, ya que no dejan pelusa ni provocan rayones. Conviene prescindir del agua, pues puede absorberse y deformar la superficie. Antes de una limpieza profunda, basta con retirar el polvo con un paño seco para mantenerla brillante y protegida.

El mármol exige un cuidado especial: se deben emplear detergentes suaves o líquidos específicos que no contengan ácido, ya que este puede dañar de manera permanente la piedra. Para evitar rayones, se aconseja usar esponjas delicadas o paños de microfibra. En caso de manchas, una mezcla de agua con jabón neutro suele ser suficiente. Al finalizar, es importante secar con un paño limpio y suave para evitar marcas de agua y conservar el brillo natural.

El acero inoxidable también requiere atención. Se recomienda aplicar productos específicos y, tras la limpieza, pasar un paño de microfibra para mantener el brillo y evitar huellas. Un detalle clave es identificar la dirección del grano del acero y limpiar siguiendo esa línea, lo que ayuda a mantener su apariencia uniforme y sin marcas visibles.

Con estas recomendaciones, tus muebles y superficies no solo lucirán impecables, sino que también prolongarán su vida útil. La clave está en elegir los productos correctos, usar accesorios adecuados y ser constante en la limpieza, de modo que cada espacio del hogar conserve su estética y funcionalidad por más tiempo.