
Familia de Marco Adriel publica carta de agradecimiento tras su liberación
La familia de Marco Adriel Delgado agradeció a los duranguenses la solidaridad mostrada durante la desaparición de Marco, "nunca estuvimos solos", señalan.
A pesar de que reconocen que quedaron dudas y muchas preguntas en el aire, lo importante es que Marco está de regreso.
A continuación el texto íntegro de la carta:
No existen palabras suficientes. Lo que vivimos fue una pesadilla. El miedo nos quitó el aliento, la angustia nos robó el sueño, y el corazón… se nos rompió en mil pedazos cuando Marco desapareció. El mundo se detuvo. Y, sin embargo, en medio del dolor más profundo, ocurrió algo poderoso: No estábamos solos.
Durango se convirtió en una sola alma. Una sola voz. Una sola oración. Una sola esperanza. Las calles se llenaron de pasos firmes, de velas encendidas, de carteles, de gritos, de manos levantadas al cielo.
Todo por un niño. Por nuestro niño. Porque Marco dejó de ser solo nuestro y se convirtió en el hijo de todo un pueblo.
Gracias. Gracias con el corazón abierto y las lágrimas aun cayendo. Gracias a cada persona que compartió su foto, que marchó, que lloró con nosotros, que nos abrazó sin conocernos.
Gracias a quienes se pusieron en nuestros zapatos, a quienes se negaron a mirar hacia otro lado, a quienes oraron sin cesar. Gracias por no soltar a Marco.
Hoy podemos decirlo con un nudo en la garganta y la voz temblorosa, pero llena de alegría: ¡Marco está en casa! ¡Marco está vivo! Y no hay milagro más grande que ese.
Gracias infinitas al gobernador Esteban Villegas, a la Fiscalía General del Estado y a todas las autoridades que nos escucharon y trabajaron incansablemente hasta lograrlo. Gracias por su compromiso, por su entrega, por su humanidad.
Nunca olvidaremos lo que hicieron por él... y por nosotros.
Y un agradecimiento especial a los medios de comunicación, que con responsabilidad y sensibilidad nos ayudaron a que la voz de Marco llegara a todos los rincones. Gracias por ser puente, por ser eco, por estar.
Sabemos que hay muchas preguntas en el aire. ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Quién? Nosotros también las tenemos. Pero hoy, eso no es lo importante. Hoy lo único que importa es que Marco volvió.
Y queremos que el mundo lo sepa: Marco es un joven bueno, inocente, lleno de luz. Un joven que jamás debió pasar por esto. Y aun así, su sonrisa sigue aquí. Más fuerte. Más viva. Más nuestra que nunca.
Este no es solo un logro de una familia. Este es un triunfo de todos. De un Durango que no se rindió. De autoridades que actuaron. De una comunidad que eligió amar y luchar como una sola.
Y aunque aún hay familias esperando, nombres que faltan, abrazos pendientes... a ellos los llevamos en el corazón. Y por ellos, seguimos orando. Hasta que todos regresen.
Con todo nuestro amor y gratitud.
¡¡GRACIAS, DURANGO!!
Familia de Marco Adriel Delgado