
¿Funcionan las mangas para proteger del sol?
En los últimos años, el uso de mangas protectoras se ha vuelto cada vez más popular, sobre todo para aquellos que se exponen por varios minutos e incluso horas al sol, ya sea por pasar un buen rato en el automóvil o por practicar algún deporte al aire libre.
Y es que estas prendas, que cubren desde la muñeca hasta la parte superior del brazo, prometen proteger la piel de los rayos ultravioleta (UV), pero ¿realmente funcionan?
La respuesta es que sí, son prácticas y muy accesibles. Sin embargo, hay que buscar las correctas, aquellas que estén fabricadas con los materiales adecuados y que cuenten con certificación de protección solar.
¿Cuáles son efectivas?
Para que una manga solar sea confiable y cumpla con su tarea de proteger, debe contar con una certificación de protección UPF (Ultraviolet Protection Factor), la escala que indica cuánta radiación UV puede bloquear una prenda.
Por ejemplo, una manga con UPF 50+ bloquea alrededor del 98 porciento de los rayos ultravioleta, lo cual es considerado un nivel alto de protección.
Además, el tipo de tejido, el color, el grosor y el ajuste también influyen. Las mangas fabricadas con tejidos de poliéster o nylon con entrelazados densos son más eficaces.
También se ha demostrado que los colores oscuros absorben más radiación UV, pero los tratamientos especiales en los tejidos permiten que incluso mangas claras sean muy efectivas si están diseñadas con tecnología UV.
¿Cuándo deben usarse?
Cuando sea inevitable exponerse al sol, es decir, aquellos que practiquen ciclismo, pesca, senderismo, manejo prolongado o trabajo en la vía pública. También son útiles para personas con piel muy sensible o condiciones como melasma o lupus.
Además de usarlas, también es recomendable combinar con el uso de protector solar en zonas expuestas, como manos, rostro y cuello.