
¿Habrá verificación vehicular en Durango?
En las últimas semanas, el presidente municipal de Durango, José Antonio Ochoa Rodríguez, ha hablado en más de una ocasión de la posibilidad de implementar la verificación vehicular, postura que es respaldada por otros actores políticos.
Como se sabe, la verificación vehicular se aplica en otras partes del país, como la Ciudad de México, con el propósito de disminuir las emisiones contaminantes de los vehículos, checando que las unidades se encuentren en buen estado mecánico.
Por supuesto, esta medida también representa un importante ingreso para los gobiernos que la aplican, pues por una parte cobran la verificación y, por el otro, multan a las unidades que no están verificadas.
El Alcalde de Durango contempla la verificación vehicular, según ha dicho, por las contingencias medioambientales que se han registrado en el presente año. Son los vehículos quienes más contaminan, argumenta.
También refiere que el 68 por ciento de los habitantes de la ciudad se transportan en vehículo particular, por lo que exhortó "a perderle el amor al carro" y utilizar el transporte público, o bien, caminar.
Es verdad que en los últimos años ha aumentado de manera considerable el número de vehículos en la ciudad de Durango y eso se refleja en los problemas de tráfico que hay en los principales bulevares y avenidas de la mancha urbana, sobre todo en las horas de entrada y salida en las escuelas.
Sin embargo, la cultura vial es uno de los grandes pendientes, tanto entre conductores como peatones, sin que hasta el momento se haya implementado una campaña efectiva en esta materia.
Existen voces que se oponen a la verificación vehicular, pues el mercado transita a los vehículos eléctricos o híbridos, aunque aún faltan muchos años para que la mayoría de la población adquiera una unidad de este tipo.
Instalar centros de verificación vehicular implica una fuerte inversión económica y la tasa de retorno toma varios años, así que presupuestalmente tampoco se ve muy conveniente.
Antes de pensar en aplicar esta medida, que sin duda lastimaría aún más la precaria economía de la población, bastaría hacer cumplir la ley que ya existe y la cual contempla sanciones para los vehículos contaminantes.
También sería conveniente poner orden en el transporte público, garantizando que cumplan con las especificaciones que marca la ley en cuanto a la antigüedad y mantenimiento, que sea un servicio eficiente, de calidad.
Además es indispensable atender el tema de las ladrilleras, que administraciones van y vienen sin poder solucionar esta situación.
La verificación vehicular es una salida fácil que puede ser interpretada como un intento de obtener mayores recursos económicos por parte del Municipio.
PUNTO Y APARTE.- Ha pasado un mes de la desaparición de Carlos Emilio Galván Valenzuela, quien fue visto por última vez en el bar Terraza Valentino en Mazatlán, sin que la Fiscalía de Sinaloa brinde algún dato sobre qué pasó con el joven duranguense.
Hasta el momento, el único efecto directo de este caso es la renuncia de Ricardo "Pity" Velarde, exsecretario de Economía del morenista Rubén Rocha Moya y socio del bar Terraza Valentino. Sin embargo, el negocio jamás ha dejado de funcionar.
La Fiscalía de Sinaloa dice que ha efectuado cuatro cateos y que tiene en su poder los videos de las cámaras de seguridad del establecimiento, los cuales analiza en coordinación con la Fiscalía General de la República (FGR), pero la familia de la víctima no ha visto dichas imágenes.
Aunque la Fiscalía sinaloense asegura que sí trabaja en la búsqueda de Carlos Emilio, llama la atención que, en un mes, no tenga ni una pista sólida como para brindar algún dato claro a la familia.
Brenda Valenzuela, mamá de Carlos Emilio, continúa con su lucha, clamando a las autoridades que encuentren a su hijo. Es importante que la sociedad no la deje sola y tampoco a las demás madres de familia que buscan incansablemente a sus seres queridos.
Nos leemos en X: @citlazoe