
'Israel no permitirá que Hezbolá reconstruya su poder'; ataque mata al número 2 de la organización
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, advirtió este domingo de que no permitirá que el grupo chiíta libanés Hezbolá se rearme y suponga una amenaza, tras la muerte de Haizam Ali Tabatabai, considerado el "número dos" de la organización, en un bombardeo israelí contra los suburbios del sur de Beirut.
"La política que sigo es absolutamente clara: bajo mi liderazgo, el Estado de Israel no permitirá que Hezbolá reconstruya su poder y no permitiremos que vuelva a representar una amenaza", dijo Netanyahu en un vídeomensaje de menos de dos minutos de duración.
"Espero que el Gobierno libanés cumpla su compromiso de desarmar a Hezbolá", añadió.
De acuerdo con fuentes médicas libanesas, al menos otras cuatro personas murieron en este ataque aéreo y 28 más resultaron heridas.
En un tono similar, el jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, teniente general Eyal Zamir, declaró en un discurso que Israel podría volver a tener que combatir en lugares previamente atacados, y dijo que se estaban "preparando para ello".
Por su parte, el Ministerio de Exteriores israelí dijo que la muerte del dirigente de Hezbolá se produjo como represalia por "las reiteradas violaciones" del grupo chiíta tanto de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU como de alto el fuego de noviembre 2024, así como a la amenaza que representaba "para Israel y la estabilidad regional".
"Los esfuerzos del gobierno libanés para abordar las graves violaciones de Hezbolá han fracasado hasta la fecha, y Hezbolá ha continuado sus intentos de restablecer y ampliar su capacidad militar y terrorista", indicó Exteriores en un comunicado.
Desde el comienzo del alto el fuego entre Israel y Líbano, el 27 de noviembre de 2024, la misión de paz de la ONU en territorio libanés (FINUL) ha contabilizado alrededor de 10 mil violaciones del acuerdo entre ambos países.