
Agenda. El próximo sábado la Selección Mexicana Femenil Sub-17 se enfrentará a Brasil por el bronce de la Copa del Mundo de la FIFA Marruecos 2025.
La Selección Mexicana sumaba 490 minutos sin recibir gol, pero esa buena racha finalizó en el momento menos esperado. El Tricolor cayó (0-1) ante Países Bajos, en las semifinales del Mundial Femenil Sub-17.
Adiós al sueño de ganar el primer campeonato y, aunque todavía resta un partido, el sábado -por el tercer lugar del torneo, contra la selección de Brasil- no será lo mismo, luego de la plausible actuación que ofrecieron las de Miguel Gamero.
En la cancha
Después de un primer tiempo carente de emociones, el marcador se abrió al minuto 69, con el gol de Lina Touzani, quien entró sin marca al área y venció a la guardameta Valentina Murrieta. El buen trabajo defensivo del Tricolor se vino abajo por una desatención.
El gol neerlandés despertó el ímpetu de México, que permaneció apagado en gran parte del encuentro. Mucho juego por las bandas, pero pocas ideas en el tramo final.
El combinado nacional intentó de todas las formas posibles, pero el muro anaranjado y la falta de contundencia tricolor impidieron que el empate llegara.
A diferencia del encuentro en la fase de grupos, ahora eran las europeas las que sufrían.
En el tiempo agregado, la silbante fue al VAR para revisar un posible penalti sobre la habilidosa Miranda Solís; sin embargo, después de tardar, decretó que no era pena máxima.
Un disparo de la capitana Berenice Ibarra (en los últimos segundos) se estrelló en el travesaño, acción que causó dolor en toda una nación, que soñaba con la final.
Merecían más: Gamero
Miguel Gamero tiene que mostrarse fuerte ante su equipo. Se nota en su rostro, se nota en su voz. La derrota con Países Bajos dolió demasiado en el seno del conjunto mexicano. Quedarse a un paso del sueño de jugar la final y buscar el campeonato, amarga.
Pero hay que mirar hacia el frente, hacia el juego por la medalla de bronce donde se medirán con Brasil. "Las jugadoras se merecían algo más, de eso estoy totalmente convencido", dijo el entrenador al término del juego por las semifinales, en el cual el Tricolor cayó ante las neerlandesas por la mínima.
No hay pretextos, no hay excusas, "hay que aceptar la derrota", recalca. Y lo ve con optimismo: "Cualquiera de los demás participantes quisiera estar en nuestro lugar, compitiendo por un tercer sitio".
La Selección Mexicana hizo un torneo digno. Quedó en segundo lugar de su grupo, un sector del que salieron las finalistas: Corea del Norte y Países Bajos. En octavos de final derrotó a Paraguay y en cuartos venció por la vía de los penaltis a Italia. Ahora, las chicas se quedaron cortas: "¿Qué faltó? Fueron detalles, detalles. Un gol nos cuesta. Pero destaco la lucha de las jugadoras, querer empatar hasta el final. Ahora hay que ir por el tercer sitio", reflexionó Gamero.
Un tercer lugar que interesa al técnico, que interesa a las jugadoras y al futbol mexicano femenil: "Hay que mantener el espíritu, la intensidad, el querer estar, será difícil, pero podemos luchar por él".