Revancha. Jaime Munguía tomó revancha del francés Bruno Surace, al que venció por la vía larga.
Jaime Munguía salió a dejarlo todo en el encordado de la ANB Arena de Riad. Con el respaldo incondicional de los mexicanos en la grada, y las instrucciones de Eddy Reynoso en su esquina, el pugilista mexicano tuvo su revancha ante el francés Bruno Surace al vencerlo por decisión unánime.
El combate dejó ver a un Munguía seguro contra su rival, permitiéndole luego de un primer round de estudio, lanzar buenas combinaciones a la zona hepática del galo. Con el paso de los episodios, Surace tomó confianza y logró preocupar a la esquina del tijuanense, al conectar en repetidas ocasiones el rostro y cuerpo del mexicano.
Los intercambios entre los boxeadores desataron la explosión de júbilo entre los aficionados, que agradecieron la entrega en el ring. La llegada del sexto round permitió a Jaime Munguía recuperar la memoria y retomar el control con ganchos que llevaron al francés en varias ocasiones a buscar refugio en las cuerdas para el séptimo, octavo y noveno episodios. El último capítulo fue intenso, dejando los mejores momentos para el mexicano, quien pese a intentarlo, no pudo concretar el nocaut.
En el combate que abrió la cartelera, el olímpico Marco Verde debutó como profesional para vencer en tan sólo 44 segundos al regiomontano Michel Polina. Con una ráfaga de golpes, Verde no dejó espacio para la duda y el réferi detuvo la pelea.