El hecho ocurrió en la zona sierra de Pueblo Nuevo y murió en el camino al Hospital General del Estado de Durango.
La tarde de este sábado, un niño de ocho años de edad, en la localidad de San Bernardino de Milpillas Chico, perteneciente al municipio de Pueblo Nuevo, Durango, se encontraba jugando con un frasco de maquillaje, al cual le echó agua y después se lo tomó, como parte de su recreación.
Minutos más tarde, el menor se empezó a sentir mal, argumentando a sus familiares que le dolía mucho la cabeza, por lo que de inmediato decidieron trasladarlo a la clínica de salud de la localidad.
Después de evaluarlo en el nosocomio local, los médicos decidieron canalizaron al Hospital Materno Infantil, en la capital del estado, debido a la gravedad de la intoxicación; sin embargo, en el trayecto, a la altura de la localidad de Mimbres, Durango, se encontraron con un retén de militares, donde les brindarons lo sprimeros auxilios, pero los elementos federales les manifestaron que el menor ya no contaba con signos vitales, por lo que decidieron seguir su camino a la ciudad de Durango para poder llevarlo a una funeraria, ubicada en la calle de Antiaguillo, en la colonia Granja Graciela.
Ya en la funeraria, a los familiares del menor les dijeron que primero tenían que realizar los trámites correspondientes, razón por la cual se dio aviso a la Fiscalía General del Estado de Durango, activando el protocolo correspondiente.
El menor fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) para la práctica de la necropsia de ley, a orden del Agente del Ministerio Público, donde se tendrá que corroborar la versión de la familia.