MVP. Tanto analistas como fanáticos colocan a Drake Maye como posible Jugador Más Valioso.
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EMILIO BARRIENTOS
El siglo de durango
Los New England Patriots se proclamaron campeones de la División Este de la AFC luego de combinar su contundente victoria 42-10 sobre los Jets de Nueva York con la derrota de los Buffalo Bills ante los Philadelphia Eagles, resultado que terminó por definir la cima divisional en la recta final de la temporada regular de la NFL.
El equipo de Nueva Inglaterra cumplió con su parte al dominar sin sobresaltos a los Jets, mientras que más tarde los Bills dejaron escapar la oportunidad de mantenerse en la pelea divisional al caer 13-12 frente a Eagles, en un duelo que se resolvió en los últimos segundos tras una fallida conversión de dos puntos que habría cambiado el desenlace.
Con esta combinación de resultados, los Patriots pusieron fin al dominio reciente de Buffalo y recuperaron el control del Este de la AFC, una división que durante años fue sinónimo de éxito para la franquicia de Foxborough y que ahora vuelve a estar bajo su mando.
Más allá del título divisional, el presente de New England ha despertado entusiasmo entre aficionados y analistas, quienes colocan al mariscal Drake Maye en la conversación por el MVP, destacando su madurez, liderazgo y capacidad para conducir a la ofensiva en momentos clave. Incluso, hay quienes pronostican unos primeros playoffs prometedores para los Patriots, impulsados por el buen momento del equipo y la confianza que genera su joven quarterback.
Con la postemporada en el horizonte, Patriots no solo celebran haber vuelto a la cima de su división, sino que alimentan la ilusión de volver a ser protagonistas en enero.