
El becerro presentó miasis en la oreja en los primeros días de desarrollo, aún sin generar la mosca.
El nuevo caso de gusano barrenador detectado el fin de semana en Sabinas, Nuevo León, a pocas millas de la frontera con Estados Unidos, encendió la alarma, pues podría afectar los avances logrados para una posible reapertura a la exportación de ganado.
"Lo que les preocupa a los americanos es el hecho de que ocurrió cerca de la carretera Monterrey-Laredo, que tiene un gran tráfico", expresó Rogelio Soto Ochoa, presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD).
El ganado salió de Veracruz rumbo a una engorda certificada, donde se detectó el caso, gracias a que se mantienen los protocolos ante la contingencia por gusano barrenador. Recordó que desde el 15 de agosto se aplica un convenio establecido para este tipo de situaciones.
Ante el hallazgo, ya se aplica el protocolo de focalización y perifocalización, además de que personal del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS) acudirá a la zona. El becerro presentó miasis en la oreja en los primeros días de desarrollo, aún sin generar la mosca.
MERCADO NACIONAL SATURADO
Soto Ochoa señaló que en la pasada revisión del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) a engordadoras de Durango se constató el buen trabajo de contención contra el gusano barrenador, lo que dejó satisfechos a los inspectores.
"Lo habíamos dicho en la revisión de la semana pasada: hubo buenos resultados y se dieron cuenta de que se está conteniendo la plaga", expresó.
Aclaró que aunque el caso detectado en Nuevo León pudiera generar inquietud, en realidad confirma la efectividad del protocolo implementado por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
Lo que sí afecta, advirtió, es que el ganado que no pudo exportarse se está quedando para el mercado nacional, lo que ha saturado las engordas.
El líder ganadero confió en que las engordas respeten los precios actuales y no incurran en abusos, como ha sucedido en ocasiones anteriores.
"Cada vez que sale un caso tienden a disminuir el precio en las engordas, pese a que hay una gran demanda de ganado de buena calidad, como el que se produce en el norte del país", concluyó.