Riesgo. A pesar de que las familias que se encuentran en esa zona ya han sido advertidas de los peligros, no quieren retirarse.
Aunque, por el momento, las lluvias registradas en la capital no han representado una amenaza para los asentamientos que se encuentran sobre la Presa del Hielo desde hace años, las autoridades aseguran que esta área sigue siendo una zona de riesgo.
Bonifacio Herrera Rivera, presidente municipal, indicó que el peligro radica en que al margen de la desembocadura de la presa se siguen construyendo viviendas.
Afirmó que las familias que viven en esa zona ya han sido notificadas para que se retiren, ya que se encuentran en un área vulnerable. Sin embargo, no atienden el llamado.
El funcionario advirtió que "la naturaleza va a tomar su cauce", por lo que siempre existe un riesgo latente para las viviendas cercanas.
Situaciones similares se presentan en otras zonas vulnerables, donde históricamente las precipitaciones han provocado afectaciones. En localidades como la que se encuentra junto a la colonia 5 de Mayo, el nivel del agua puede subir entre un metro y medio y un metro con veinte centímetros.
A la gente se le dice: "ustedes están en una zona inundable", pero no quieren retirarse, a pesar de que se les advierte que es por su propio bien, señaló el Alcalde.
Reconoció que en su momento hubo una reacción tardía por parte de las autoridades de los distintos niveles, que no actuaron a tiempo para evitar que se instalaran. "No es lo mismo evitar cuando apenas se están tratando de instalar", expresó.
Si bien las lluvias generan afectaciones, reconoció que siempre es preferible lidiar con ellas que con los estragos de la sequía, cuyos efectos son mucho más graves.
Respecto al derrame de las presas como Peña del Águila, que tiene a localidades cercanas y desemboca al río La Sauceda, indicó que se mantiene comunicación con las autoridades locales, como juntas municipales y jefes de cuartel, para que estén atentos de los derrames anunciados por la Conagua.
Se les ha dado aviso para que permanezcan en estado de alerta, ya que se encuentran en zonas complicadas. Además, es necesario seguir de cerca el desarrollo de los pronósticos, que indican que las lluvias podrían continuar.
En el caso de la presa Peña del Águila, al ser una presa derivadora, no tiene capacidad de contención. "Es algo que no se puede controlar; si recibe más agua de la que puede manejar, simplemente se derrama", explicó. Por ello, la vigilancia es constante, ya que cualquier incremento en el caudal no podrá ser contenido.
Para prevenir riesgos en la población cercana a la colonia 5 de Mayo, se realizaron trabajos de desazolve entre junio y julio con maquinaria, con el fin de que el arroyo mantenga un buen cauce. Además, se entregaron costaleras para contener el agua de manera inmediata en caso necesario.
En cuanto a la presa Guadalupe Victoria, señaló que, de acuerdo con la Conagua, todavía tiene capacidad para recibir buenos volúmenes de agua.