
Revelan las causas por las que un joven entró a la jaula de una leona que posteriormente lo mató
La muerte de un joven de 19 años dentro del recinto de una leona en un zoológico de João Pessoa, en Brasil, ha generado fuerte conmoción y múltiples interrogantes. Con el paso de los días, autoridades y familiares han dado a conocer información que permite entender qué motivó al joven a escalar las barreras de seguridad y entrar directamente al hábitat del felino, acción que terminó costándole la vida.
Un historial marcado por trastornos mentales y abandono
De acuerdo con los reportes oficiales, el joven, identificado como Gerson de Melo Machado, padecía un trastorno psiquiátrico severo que había sido diagnosticado desde la adolescencia. Su historia también estuvo marcada por abandono familiar, su madre sufría esquizofrenia y él pasó gran parte de su vida en instituciones de acogida sin ser adoptado.
Personas cercanas señalaron que Gerson vivía episodios de desorientación, impulsividad y pensamientos extremos que requerían supervisión constante. Incluso había manifestado en varias ocasiones que soñaba con convertirse en “domador de leones”, un deseo que con el tiempo se volvió una obsesión vinculada a su condición mental.
Esta mezcla de vulnerabilidad y fantasía habría sido determinante para que decidiera ingresar al área del felino sin medir las consecuencias.
El momento del ataque
Según las investigaciones, el joven escaló un muro de gran altura y logró burlar las barreras perimetrales del zoológico. Testigos mencionaron que descendió por una estructura de troncos utilizada para la ambientación del hábitat, lo que le permitió ingresar directamente a la jaula de la leona.
Una vez dentro, el ataque ocurrió en cuestión de segundos. La leona se lanzó contra él instintivamente, sujetándolo por una pierna y arrastrándolo hacia la zona interior del recinto.
Personal del zoológico trató de intervenir, pero las heridas causadas por el felino fueron demasiado graves. El informe forense determinó que la muerte fue prácticamente inmediata debido a lesiones profundas en cuello y extremidades.
Tras el incidente, especialistas en salud mental han criticado la falta de atención adecuada que el joven recibió durante años. Señalan que su historial psiquiátrico exigía supervisión y tratamiento constante, y que el sistema falló al no ofrecerle un entorno protegido.
El caso expone no solo la vulnerabilidad de personas con enfermedades mentales severas, sino también la importancia de reforzar medidas de seguridad en instituciones que albergan animales salvajes. La muerte del joven deja un llamado urgente a mejorar los protocolos de atención psiquiátrica y a sensibilizar sobre los riesgos que implica ignorar señales de alerta en personas en situación de riesgo.