Un segundo día de plantón se cumplió en el Hospital Integral de La Guajolota, en el municipio de Mezquital, Durango, por parte de habitantes de la propia comunidad y de localidades cercanas, ante la deficiente atención médica que se ofrece en el lugar y que ha puesto en riesgo la vida de varias personas.
Los habitantes de la zona indígena reclaman únicamente una atención digna a la salud y que se mejoren las condiciones del hospital, algo que ya han denunciado anteriormente, pero que, señalan, la Secretaría de Salud del Estado de Durango ha ignorado.
Desde el pasado 8 de noviembre, los habitantes se organizaron para realizar un plantón en el exterior del hospital ante diversas situaciones de negligencia registradas en contra de algunos pacientes, incluidos menores de edad.
Aunque han permitido el acceso a quienes requieren atención médica, no pretenden retirarse de las instalaciones hasta que se resuelvan al menos las demandas más básicas.
Denuncian que, de manera reiterada, los pacientes no reciben el servicio adecuado, ni un trato digno, y que muchos han tenido que permanecer fuera del hospital esperando ser atendidos, situación que en numerosos casos pone en riesgo su vida.
PETICIONES
En un oficio dirigido a las autoridades correspondientes, solicitan que el personal que labora en el hospital tenga la disposición de atender a los pacientes en el momento que lo requieran, ya que muchos acuden desde comunidades lejanas en busca del servicio.
Exigen un trato humano y acorde con los principios fundamentales de la salud pública, así como mejorar la atención en todos los aspectos para garantizar el bienestar de los habitantes que dependen de esta institución.
Piden el cambio de personal y señalan al contador por la mala administración del hospital, ya que no es la primera vez que lo denuncian, así como al director Raúl Nava Méndez y a las enfermeras Dora de la Cerda Adrino, Norma Contreras González y Norma Cabrera Aragón, cuyo relevo se ha solicitado desde hace más de un año.
La preocupación llevó a los habitantes a organizarse, y esperan que sus demandas lleguen a las autoridades correspondientes y finalmente se atiendan.