
Trump declara al fentanilo como 'arma de destrucción masiva' y presume ofensiva contra cárteles
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este lunes que declarará el fentanilo como un “arma de destrucción masiva”.
En un evento para entregar la Medalla a la Defensa de la Frontera con México, Trump dijo que emitirá una orden ejecutiva para hacer la declaratoria, al advertir que los cárteles de la droga son “enemigos de Estados Unidos”.
Trump afirmó que su administración está “desmantelando a los cárteles” y que, tras haber heredado “una de las peores fronteras del mundo”, ahora se ha convertido en “la más segura”.
Aseguró que sus ataques contra supuestas narcolanchas en El Caribe y El Pacífico han frenado el flujo marítimo de drogas hacia Estados Unidos en más de 90%, e insistió en que pronto iniciará los ataques contra los cárteles vía terrestre. “Es mucho más fácil”.
El secretario de Guerra, Pete Hegseth, aseguró que la “seguridad fronteriza es seguridad nacional”.
A su turno, el zar fronterizo, Tom Homan, dijo que “una frontera segura salva vidas”.
En el pasado, republicanos han solicitado al gobierno estadounidense declarar el fentanilo como un arma de destrucción masiva, con el argumento de que se destinaran más recursos y una mayor coordinación para combatir esta droga.
Sin embargo, la administración anterior de Joe Biden descartó esa medida. En su momento, Todd Robinson, el entonces encargado de la oficina antinarcóticos del Departamento de Estado, alegó que “no vemos que catalogar el fentanilo como arma de destrucción masiva nos dé ninguna competencia que no tengamos”.
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo que la declaratoria "es otra medida más en la campaña del presidente Trump contra el fentanilo, en nombre de todos los estadounidenses que han perdido a un ser querido a causa de este veneno mortal".
Bajo la declaratoria, la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, es instruida para que "inicie inmediatamente acciones penales, agrave las penas y aplique variaciones en las sentencias en los casos de tráfico de fentanilo".
La orden también instruye al secretario de Estado y al secretario del Tesoro a que adopten las medidas oportunas contra los activos y las instituciones financieras pertinentes de quienes participen o apoyen la fabricación, distribución y venta de fentanilo ilícito y sus principales precursores químicos.
Bajo la declaratoria, Hegseth y Bondi deberán determinar si el Departamento de Guerra "debe proporcionar recursos de seguridad nacional mejorados al Departamento de Justicia según sea necesario durante una situación de emergencia que involucre un arma de destrucción masiva".
También se deberán actualizar las directivas relacionadas con la respuesta a incidentes químicos para incluir la amenaza del fentanilo.
La orden "instruye al Secretario de Seguridad Nacional a identificar las redes de contrabando de fentanilo utilizando inteligencia sobre amenazas relacionadas con las armas de destrucción masiva y la no proliferación".