
Violencia. Los famliares que trasladaron a Gilberto Flores a recibir atención médica declararon que repentinamente se sintió herido.
La celebración del Sagrado Corazón en un poblado de Pánuco de Coronado, donde se acostumbra hacer detonaciones de arma de fuego, dejó a un varón sin vida.
De acuerdo con los primeros reportes, aproximadamente a las 19:00 horas de este pasado viernes se realizaba una procesión en el poblado Francisco Serrano, del municipio antes mencionado y, como es "costumbre", algunas personas realizaron disparos además de consumir bebidas alcohólicas.
Fue en ese lapso cuando, repentinamente, Gilberto Flores, de 35 años de edad, se sintió herido en la región abdominal y fue trasladado inicialmente a recibir atención médica al Hospital de Francisco I. Madero, cabecera municipal.
Sin embargo, debido a la gravedad de la lesión, se dispuso su traslado al Hospital General 450 de la capital duranguense, donde finalmente falleció la madrugada de este sábado.