Gigi Hadid.
El esperado Victoria's Secret Fashion Show 2025 regresó a Nueva York y se convirtió en una declaración poderosa sobre inclusión, empoderamiento y modelos de representación.
Con una mezcla de figuras ya consagradas y nuevos rostros, la pasarela de lencería, reafirmó su ánimo de abrir ventanas a diferentes cuerpos, identidades y talentos.
CONTRA LO TRADICIONAL
En esta edición, la casa Victoria's Secret logró articular una selección de modelos que desafía el canon tradicional.
Entre las estrellas presentes estuvieron nombres como Adriana Lima, Candice Swanepoel, Lily Aldridge y Alessandra Ambrosio, quienes han sido pilares del desfile en años anteriores. También apareció Jasmine Tookes, quien lució su embarazo en la pista.
Pero el foco de esta ocasión estuvo en la integración de artistas como Yumi Nu, Precious Lee y Alex Consani, quienes representan una nueva generación que exige que la diversidad no sea solo un gesto simbólico, sino parte esencial del diseño.
Un punto que rompió esquemas fue la participación de Angel Reese, quien hizo historia al convertirse en la primera atleta profesional en desfilar como "ángel" de Victoria's Secret. Su presencia marcó un puente entre el deporte y la moda, y subrayó el carácter evolutivo del show.
Musicalmente, la noche estuvo animada por una propuesta completamente femenina con Missy Elliott, Karol G y Madison Beer, además del grupo TWICE, que aportaron energía y espectáculo entre las pasarelas.
La producción estuvo a cargo de Adam Selman, quien como nuevo director creativo continúa el rumbo de transformación que la marca ha venido impulsando.
El show fue retransmitido en diferentes plataformas, incluyendo Amazon Live y Prime Video, con lo que se garantizó que el público global pudiera ser testigo de este momento que va más allá de la estética para incidir en lo simbólico.
