
Cajas negras, intactas: Aeroméxico
Las dos cajas negras del avión Embraer 190 que el martes de desplomó en terrenos del Aeropuerto Internacional Guadalupe Victoria, ya fueron localizadas y se encuentran intactas.
Eso facilitará la investigación del accidente, pero no evitará que esta se prolongue por meses, reconoció en Durango el director general de Aeroméxico, Andrés Conesa Labastida.
Dicho proceso, dijo, ya está en manos de la Dirección General de Aeronáutica Civil, que se encargará de todos los procedimientos de ahora en adelante.
En rueda de prensa posterior a un recorrido por la zona del siniestro, el ejecutivo explicó que en todo momento se ha proporcionado alhojamiento a los familiares que llegaron a Durango para acompañar a las personas lesionadas, incluyendo las facilidades de vuelo gratuito, y se ofrece apoyo psicológico junto con las disposiciones necesarias para realizar traslados en caso de ser necesaria otro tipo de intervención clínica.
Además, existe apoyo económico para cada uno de los pasajeros a fin de que compre ropa y artículos personales, considerando la pérdida de todos los equipajes; dijo que Grupo Aeroméxico asumirá la totalidad del gasto generado por las afectaciones de los pasajeros, incluyendo los de tipo hospitalarios.
Conesa fue cuestionado sobre el vínculo entre las condiciones climáticas del martes y el accidente. Admitió, en tal sentido, que todos aviones requieren autorización de las torres de control para despegar, pero dijo que no quería especular porque pudieron existir múltiples factores para causar el accidente.
En la misma conferencia de prensa, Ricardo de la Cruz Musalem, director General de Protección Civil del Gobierno Federal, destacó que la tarde del martes se vivió un accidente sin precedentes en la condición de que no se registraron víctimas fatales.
"Hoy podemos hablar que los protocolos de emergencia funcionan, que dan resultado y por eso los debemos de seguir adoptando y practicando", expresó en su intervención.
Dijo que, hasta pasadas las 14:00 horas, permanecían hospitalizadas 22 personas, aunque la mayoría se estima su alta entre la tarde de este miércoles y el transcurso del jueves; otros permanecerán en observación. Caso particular es el de Carlos Galván Meyrán, piloto del avión siniestrado, con quien dijo que ya había sostenido conversación, que se encontraba consciente y con diagnóstico de salud favorable.