Lo que debes saber antes de colocarte el implante anticonceptivo
Si se trata de cuidarnos cuando mantenemos relaciones sexuales y queremos asegurarnos de evitar embarazos, los métodos anticonceptivos son una opción y existen diferentes para cada cuerpo.
Hoy hablaremos del implante, la opción anticonceptiva a largo plazo para las mujeres.
Se trata de una pequeña varilla flexible y plástica que se coloca en el brazo bajo la piel y libera dosis bajas de la hormona progestacional la cual es encargada de engrosar la mucosa de nuestro cuello uterino y afinar el revestimiento del útero.
Es importante que sepas que el implante se puede quitar en cualquier momento, tu fertilidad regresa rápidamente y no contiene estrógeno, pero esto no quiere decir que sea el adecuado para cualquier mujer.
Si sufres de alergia a los componentes, eres de las personas que tiene coágulos de sangre graves, cuentas con tumores en el hígado o enfermedades hepáticas, sospechas que tienes cáncer de mama, presentan hemorragias anormales, entre otras razones, es importante que sepas que no puedes optar por este método y tu doctor te lo debe hacer saber, según un artículo publicado en Mayo Clinic de Minnesota.
El implante anticonceptivo tiene efectos secundarios para nuestro cuerpo, el dolor de espalda y abdominal, el aumento a presentar quistes no cancerosos, la disminución del deseo sexual, mareos, dolor de cabeza, cambios de humor depresión, dolor de mamas, sequedad vaginal, aumento de peso, entre otras.
El especialista deberá evaluar tu estado de salud antes de colocarte cualquiera de los métodos anticonceptivos que elijas.
Para colocarlo necesitarás recostarte con el codo flexionado y ubicado cerca de la cabeza, el profesional de la salud realizará un surco entre los músculos bíceps y tríceps de la parte interna de tu brazo e inyectará un anestésico para después insertar el dispositivo bajo la piel.