Tras el revuelo que causo el anuncio de que Estados Unidos incrementará los aranceles que se aplican a la importación de acero y aluminio, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio el siguiente paso al amenazar con perjudicar a las compañías automotrices de la Unión Europea (UE) con una medida similar.
A través de mensajes en Twitter, Trump pareció responder a las advertencias de los líderes europeos al afirmar que "si la UE quiere aumentar más sus aranceles, simplemente aplicaremos un impuesto sobre sus automóviles que ingresen libremente en Estados Unidos".
Actualmente, Estados Unidos impone un arancel de 2.5 por ciento a la importación de automóviles y un arancel del 25 por ciento sobre la importación de camiones y furgonetas comerciales.