Joven fingió un embarazo y aborto

Durante nueve meses, una joven de 18 años, mantuvo un embarazo ficticio, después vistió a un muñeco, y organizó un funeral para sostener que había sufrido un aborto espontáneo. Todo esto ocurrió luego de que su novio se fue a trabajar a Estados Unidos.

Vía telefónica se reportó el incidente en el poblado El Nayar, en este se indicó la muerte de un bebé.

Al acudir, los policías investigadores encontraron que se trataba de un aborto falso, que ya había sido descubierto por familiares que estuvieron engañados durante toda la "gestación".

LA ESCENA

En el sillón de una sala, estaba la joven de cabello oscuro, ojos medianos, boca pequeña, apeñuscada (casi hacía un puchero). Tenía el cabello atado hacia atrás y usaba ropa deportiva con el número 87 en la sudadera, además sus manos apretaban un celular.

Testigos indicaron que antes de esta escena de "resignación", la chica estuvo a punto de ser "linchada", por la familia de su novio, que descubrió el engaño.

Eran como las ocho de la noche cuando sucedió esto, porque una hora antes, la joven, de 18 años de edad, habitante del poblado Sebastián Lerdo de Tejada del municipio de Durango, llamó a casa de su suegra, quien vive en la localidad El Pueblito.

Por celular le informó que su hijo había nacido pero muerto, así que la mujer se puso de luto de inmediato. Le pidió a la joven que no se moviera de la casa, ella iría al poblado, por sus propios medios. Sin embargo la joven se negó, advirtiendo que iría hasta el domicilio de la abuela del "menor".

La supuesta madre primeriza llegó a El Pueblito, con un pequeño ataúd, para lo cual contrató los servicios de la funeraria Gallardo en El Nayar, que incluso le acompañó.

La suegra, triste, pidió ver a su nieto, a lo que de manera contundente se negó la joven. Argumentó que no toleraba la escena de su primer hijo fallecido.

Pese a la insistencia de la 'abuela' del supuesto occiso, su respuesta fue negativa; la mujer mayor, extrañada y desesperada, le arrebató la caja y descubrió que no había un cadáver sino un muñeco envuelto en una cobija para bebé.

El mono vestía perfectamente un mameluco amarillo con lunares blancos, además del gorro del traje; tenía puesta una boina también en amarillo, con líneas blancas.

Estaba como "tamal", envuelto en una cobija color azul. Al llegar los policías, a la joven no le quedó más que aceptar la ocurrencia de un engaño.

Desde luego, los policías debieron intervenir para evitar que la joven fuera agredida tras la indignación de la familia engañada.

LA HISTORIA

Todo inició en enero, cuando su novio, con quien ya se había ido a vivir a casa de su suegra en El Pueblito, decidió viajar a Estados Unidos para trabajar. Antes de su partida, ella le confesó que estaba embarazada, una condición que desmintió la hermana de la joven ante la policía.

Afirmó que en ese tiempo tenían sospechas de un embarazo pero tras una prueba lo descartaron; sin embargo, los familiares de la joven desconocían que sostuvo lo contrario ante la familia de su pareja.

Luego de que él se fue, la suegra le recomendó a la chica irse a casa de sus padres, en donde la cuidaran mientras tenía al bebé. Por esto es que aseguran que nunca se enteraron de que era falso, hasta que hizo público el supuesto aborto espontáneo que sufrió.

En ese momento, la familia aludida intentó interponer una denuncia, pero se cuestionaban cuál sería el delito cometido y nunca les quedó claro, así que desecharon la idea.

En el Código Penal, el caso podría encontrarse en el artículo 210, en donde se establece el delito de fraude que se comete cuando a través de un engaño, alguien, se hace ilícitamente de una cosa o alcanza un lucro indebido.

Sin embargo, definir algún delito requiere de un análisis profundo realizado por un especialista.

Más allá de la comisión de un delito, para la psiquiatra Soledad Ruiz Canaán, es evidente la existencia de una conducta psicológica inadecuada, por lo que la chica debe ser diagnosticada y sobre todo atendida para evitar que su condición empeore. Aunque, la salud mental, sigue como un tema de menor importancia entre las familias.

Explicó que, la joven podría ser víctima de diversos padecimientos: inseguridad y codependencia hacia el novio, podrían ser algunos.

"Tiene miedo a perder al novio (...) siente o cree de manera inmadura y torpe que lo va amarrar con el embarazo", describe.

Existe otro factor que no se relaciona con un padecimiento económico y que mencionó la también directora del Instituto de Salud Mental. Y es que la necesidad de recursos pudo causar en la chica este comportamiento inadecuado, para conseguir dinero durante nueve meses.

Empero, independientemente de esto, vivir por meses un embarazo y luego un aborto falso, habla de un deterioro de la capacidad de raciocinio, "ahí si estamos frente a un problema que habría que detectar de valorar".

Lo que más llamó la atención, en el hecho, fue la pequeña caja de muerto con el muñeco, situación que psiquaitricamente muestra una conducta "medio" sociopática, dijo Ruiz Canaán. Esto puede definirse como una condición psiquiátrica caracterizada por un comportamiento crónico de manipulación, explotación o violación de los derechos de los demás.