Cuidados para el contorno de tus ojos
La piel del contorno de los ojos es el área más sensible del rostro. Tiene apenas 0.5 milímetros de grosor, lo cual quiere decir que es cinco veces más delgada que la piel del resto de la cara. Esta característica la hace propensa a mostrar fácilmente signos de fatiga o estrés, pérdida de colágeno, entre otras, que suelen traducirse en bolsas y en esos molestos círculos oscuros que conocemos como ojeras.
Las causas son variadas, pueden ser por genética o por la edad. Y es que a medida que pasan los años, la piel va perdiendo colágeno y se hace menos elástica y más delgada, lo cual hace más visibles los vasos sanguíneos.
Asimismo, los hábitos inadecuados de estilo de vida, como no dormir lo suficiente, padecer estrés continuo, ingerir menos de 1.5 litros de agua al día, tener una dieta alta en sal y en productos procesados, así como no hidratar la piel, ni usar protección solar o aplicar cosméticos irritantes, pueden favorecer la aparición o acentuar las ojeras ya existentes.
TRATAMIENTOS PARA CADA CASO: MESOTERAPIA
Cuando el problema es la falta de elasticidad y tonicidad se puede recurrir a la mesoterapia, radiofrecuencia o la aplicación de ácido hialurónico, que también será muy útil para disminuir el aspecto hundido.
PEELING
Si se trata de ojeras pigmentadas, lo mejor es optar por un “peeling”, el uso de cremas aclarantes y de protección solar de factor alto.
DRENAJES
Para las ojeras azules y moradas, que tienden a acentuarse con la edad, se recomiendan los drenajes.
MASAJES O COMPRESAS
Para las temporales, ocasionadas por fatiga o algún padecimiento que nos da un aspecto demacrado, se pueden hacer drenajes, masajes relajantes o colocar compresas frías para acabar con el problema.