Luego de aterrizar en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el nuevo Embajador de Estados Unidos, Christopher Landau aseguró que arriba al país con la disposición de escuchar y aprender.
"Mi mensaje es muy sencillo: Llego con la mano extendida", indicó en un breve mensaje a los medios.
"Nuestros países son socios, vecinos y amigos; así es hoy y así será para siempre", añadió.
El abogado de profesión llegó ayer alrededor de las 10:00 horas en un vuelo comercial desde Houston y ofreció su mensaje en la Terminal 1.
Reconoció que hay retos en la relación bilateral pero señaló que es lo normal en una relación tan cercana.
"Estados Unidos gana cuando hay un México próspero y estable, y México gana cuando hay un Estados Unidos próspero y estable", apuntó.
"Realmente no podemos perder cuenta del enorme sincretismo que existe entre nuestra naciones".
El nuevo representante del Gobierno de Donald Trump dijo que quiere conocer todo México y que su propósito, al final de su encomienda frente a la Embajada es que su español tenga acento mexicano.
Ante la imposibilidad de contestar preguntas, en tono de broma pidió a los representantes de la prensa: "Escuchen bien mi acento, porque les prometo que va a cambiar".
"Vengo aquí a escuchar y a aprender", expresó.