Muy puntual llegaron los señores Maurizio Arcaio y Tanya Benítez de Arcaio con sus herederas Antonella y las más pequeña Loredana a la parroquia de Santa Rosa de Lima, en donde la chiquita recibiría el sacramento del Bautismo de manos del sacerdote Tomás Cardiel Bacio, quien los recibió desde la puerta del recinto católico para dar por iniciada la ceremonia.
El importante compromiso de apadrinar a Loredana fue aceptado por Vincenzo Zerno y Lina Scamarda, quienes viajaron desde la ciudad de Palermo, Italia, para estar especialmente en el evento y entregarle a su ahijada su ajuar, su medalla, pero sobre todo la seguridad de que siempre estarán ahí para cuando ella lo necesite.
El sentir.
Muy emocionados por el evento se congregaron también los abuelitos de la festejada, Enrique Benítez Vargas e Irene Ojeda de Benítez, y Vincenzo Arcaio quien también llegó del país conocido por la forma de la bota en nombre de su esposa María Antonia Scamarda (f), para obsequiarle a su nieta una exquisita esclava con su nombre.
Al despedirse en el templo, papás, padrinos, festejada y seres queridos se trasladaron hacia la casa sede del Club Campestre en donde se ofreció una espléndida recepción en honor de Loredana. El sitio lució romántico con las tonalidades rosa fucsia y pastel combinado perfecto con los centros de mesa que fueron unos floreros de cristal que contenían agua, rosas rosas y velas flotantes, y por el exterior lilis y orquídeas con follaje.
Los asistentes degustaron un rico banquete, preparado especialmente para la ocasión y disfrutaron del buen ambiente que procedió de la música de corte norteña, mariachi y el conjunto de variedad que puso a bailar a todos y a cantar “Las mañanitas”, cuando entró el siguiente día, y es que la mamá de la festejada, Tanya de Arcaio, celebraba su aniversario de vida y también fue felicitada.