Todo el mundo sabe que las almendras son riquísimas, pero ¿sabía que la almendra es muy versátil, porque está llena de nutrición e historia?
Hay dos clases de almendras, las dulces y amargas. Las dulces son comestibles, similares a las nueces y usadas en la cocina. El aceite de almendras amargas, que no son comestibles, se usa en la producción de extractos de condimentos para comida y licores.
La almendra es un fruto de hueso relativo a la cereza, ciruela y durazno. Mientras crecen las almendras, se parecen al durazno hasta que llegan a la madurez. Al madurar la almendra, la cáscara se abre, voltea para afuera, y echa para fuera la nuez.
A consecuencia de su proximidad genética a la cereza, ciruela y durazno, ramitos del almendro pueden ser injertados con árboles de frutos de hueso.
La primavera en una granja de almendros es una fiesta visual. En regiones del mundo donde abundan los almendros, se celebra esta temporada importante con festivales llenos de flores de este fruto. Si tala un almendro, y éste manda brotes del tocón, en unos años se convertirá de nuevo en árbol.
Las almendras fueron introducidas a California a mediados de 1700. Los 6,000 cultivadores en California producen el cien por ciento del abastecimiento comercial doméstico y el ochenta por ciento del abastecimiento mundial. Más de 90 naciones importan almendras californianas, con Alemania y Japón encabezando la lista del consumo exportador de este producto.
El almendro es nativo del sudoeste de Asia. Las primeras variedades de almendras fueron encontradas en China, de donde comerciantes las llevaron a Grecia, Turquía y al Medio Oriente a través del antiguo camino de seda.
Historiadores generalmente están de acuerdo que las almendras son entre las primeras comidas cultivadas. Se mencionan en el Antiguo Testamento de la Biblia, y en tiempos clásicos los romanos ofrecían almendras azucaradas envueltas en tul como obsequios, porque simbolizan hijos, felicidad, romance, buena salud y fortuna.
Las almendras son una fuente estupenda para la proteína tanto como para el calcio. En el Japón, una mezcla de sardinas secas y trocitos de almendras es una merienda popular entre jóvenes.
Las almendras proporcionan pequeñas cantidades de hierro, fósforo y vitaminas B. Se pueden comer crudas, peladas o tostadas y se usan mucho en la preparación de confites. Mazapán, un dulce tradicional, es una pasta hecha de almendras. Además, la almendra se usa mucho en la cocina asiática de platos vegetarianos, y de carne, pollo y pescado.
Exclusiva
de California
Casi 500,000 acres de almendros disfrutan del sol californiano en el valle central. Es aquí donde se hallará el único cultivo comercial de almendras en América del Norte. Un producto de exportación importante, las almendras continuamente salen de nuestras tierras con destino a Alemania, el consumidor más grande de almendras californianas. Japón, el segundo importador, es una nación donde la almendra es cotizada para todo tipo de ocasión.
Versátil
y deliciosa
El almendro florece en la primavera y produce sus semillas comestibles en el otoño. Son tan deliciosas crudas o tostadas, en la merienda o como ingrediente principal en una receta especial que es difícil resistir comer unas pocas. Pueden ser cubiertas de un sinfín de deliciosos sabores para acompañar a las populares almendras ahumadas y los deleites cubiertos de chocolate.
Recomendadas
para la buenan salud
No es sorprendente que las almendras se encuentren en la mayoría de cocinas caseras, y se usan mucho en la industria de comida. Las almendras realzan la comida con su sabor tan característico, y esto se debe a su crujido único que libera su sabor distintivo cuando uno pruebe su sustancia. Antes de que se nos olvide, las almendras son una de las comidas más nutritivas, llenas de calcio, potasio y magnesio. No tienen colesterol pero tienen mucho aceite poliinsaturado, bueno. Muchos estudios indican que las almendras son beneficiosas para la salud, y las nueces son recomendadas como parte de un programa saludable para el corazón.
Reduce el colesterol
en la sangre
Las almendras pueden ayudar a reducir significativamente la cantidad de colesterol “malo” (LDL) en las personas con niveles altos y, de esta manera, disminuir el riesgo de padecer algún tipo de afección coronaria, según un estudio financiado por la Comisión de la Almendra (California) y el Gobierno canadiense. Los resultados demostraron que la cantidad mayor de almendras había reducido los niveles de lipoproteínas de baja densidad, es decir, el colesterol perjudicial un 9.4%. Por su parte, la dosis media supuso una reducción del 4.4%, mientras que la barrita de trigo no dio lugar a ningún cambio en el colesterol de los pacientes.
Cultivo y sus beneficios
Del latín prunus amydalus, la almendra florece de enero a febrero.
Principios activos: Las almendras contienen gran cantidad de aceite que, en algunos casos, supera el 65%; también contienen azúcar de caña, fécula, materias gomosas, colesterinas, asparagina, etc. En las amargas se encuentra además amigdalina, que es la causa de su
toxicidad.
Propiedades: Tienen propiedades ligeramente laxantes; las
almendras amargas son antiespasmódicas. Molida, su harina se
emplea como emoliente para la piel.
Aplicaciones: Con las almendras dulces se prepara la horchata o
leche de almendras, refrescante y ligeramente laxante. De forma similar y añadiendo azúcar, se hace el jarabe de almendras de propiedades antitusígenas. El aceite de almendras dulces, tomado en dosis de 30 grs. es un suave laxante muy bien tolerado por personas delicadas.
Uso cosmético: El aceite de almendras forma parte de gran
cantidad de cremas y pomadas frías del mercado. En el volumen
dedicado a la fitocosmética podremos comprobar las numerosas
preparaciones en la que toma parte este aceite.
Partes utilizadas: Las almendras.
Presentación: Las almendras crudas, tostadas en polvo, con cáscara y sin ella. Aceite de almendras dulces.
FUENTE: Investigación El Siglo de Durango.
Dulces
250 gramos de almendras
150 gramos de azúcar
2 huevos
1 cucharadita de clavo en polvo
3 cucharaditas de canela
Procedimiento
Pelar la mitad de las almendras y tostarlas todas ligeramente en el horno.
Triturarlas finamente y unir con el azúcar, un huevo, la yema de otro, (reservando la clara en el refrigerador) y las especias.
Poner la masa en un cuenco y dejar tapado con un paño seco 24 horas.
Encender el horno a 200°C.
Batir la clara reservada a punto de nieve e incorporar a la masa.
Formar bolitas y poner en una bandeja de horno engrasada.
Cocer en el horno durante diez minuto.
Para obtener una excelente hidratación
Aceite de almendra para el cuerpo
Ingredientes:
1 vaso de aceite de almendra dulce.
6 gotas de aceite de canela.
30 grs. de cera virgen.
Procedimiento
Colocar a baño de maría la cera virgen hasta que se derrita.
Luego agregar el aceite de almendra y de canela.
Se aparta del fuego y se deja enfriar.
Se aplica en el cuerpo por 20 minutos y se retira con abundante agua tibia.
FUENTE: Investigación El Siglo de Durango.