Beijing, China (Notimex).- Silvan Shalom, ministro de Asuntos Exteriores de Israel, pidió al Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 realizar una ceremonia oficial en memoria de los atletas israelíes asesinados en Munich 1972.
El funcionario pidió recordar a las víctimas de Munich 72 en la reunión que sostuvo con el alcalde de esta ciudad, Liu Jingmin, quien también es vicepresidente del Comité de Organizador.
“Le pedí que se mencione la matanza de los deportistas israelíes por primera vez en unos Juegos Olímpicos, y los de Beijing son una buena oportunidad”, sostuvo el Canciller israelí.
En los Juegos Olímpicos de Munich 72 en la Villa Olímpica de la ciudad alemana fueron secuestrados y después asesinados 11 atletas y entrenadores de la delegación deportiva israelí a manos del grupo denominado “Septiembre Negro”, conformado por terroristas palestinos.
Para Beijing 2008, Silvan Shalom hizo saber sobre la disposición de las compañías israelíes para participar en los preparativos de la justa olímpica china, tras recordar que en Atenas 2004 los contratos que obtuvo su país fueron por 192 millones de euros (248.14 millones de dólares).
Página negra
Alemania quería que los Juegos Olímpicos de 1972 ocurrieran de la mejor forma posible. Para organizar esas Olimpiadas los gastos fueron de aproximadamente 800 millones de dólares. Las cifras fueron suficientes para la construcción de instalaciones modernas y confortables.
Pero el sueño alemán duró poco. 11 integrantes de la delegación de Israel fueron asesinados por un grupo terrorista árabe llamado “Septiembre Negro”. El crimen paralizó las competiciones durante 24 horas y inclusive había expectativas de que el evento fuera cancelado.
Pero el presidente del Comité Olímpico Internacional, Avery Brundage, decidió continuar. Los organizadores quisieron concentrar el máximo de pruebas en el mínimo de espacio para evitar otro caos y proteger a los atletas y el público.