Fotos y texto: Javier Guerrero Romero |
Para Mayela del Carmen
Una de las instituciones académicas de más prestigio en Durango es, sin duda, el Tecno, apócope con el que se suele designar al Instituto Tecnológico de Durango; construido en un gran predio de poco más de 21 hectáreas, es un punto de referencia dentro de la ciudad.
Sus espaciosas instalaciones académicas, deportivas y culturales, sus bien cuidados jardines y áreas de descanso, dan cabida a su numerosa y joven población estudiantil.
Reconocida como una de las instituciones formadoras de profesionistas de más prestigio en México, ha recorrido un largo camino para forjar su fama y renombre, que es preciso no olvidar, y por eso hay que memorar el largo trabajo y esfuerzo que ha realizado toda la comunidad técnica.
GOBERNANTE VISIONARIO
El inicio del gobierno del general Elpido G. Velázquez, a fines de 1940, permitió en Durango el auge del desarrollo urbano y la arquitectura, propiciado por la llegada de nuevos capitales de duranguenses radicados en la capital del país y por las inversiones locales.
El general Velázquez, sin duda uno de los mejores gobernantes de Durango, sentó las bases de la planeación urbana de la ciudad, ordenando el crecimiento sistemático hacia el oriente de la ciudad, diseñando nuevas vialidades y colonias, concibiendo por primera vez el crecimiento de la ciudad más allá del Centro Histórico.
Para mejorar la comunicación de esta nueva zona en desarrollo, prolongó diversas avenidas de la ciudad para hacerlas confluir en las afueras de la zona urbana en una gran glorieta de distribución, justo en el punto donde se bifurcaban las carreteras a Zacatecas y Torreón. Además, impulsó la infraestructura educativa de la zona, con la construcción de las escuelas, e impulsó la formación de una nueva institución de educación superior: el Instituto Tecnológico de Durango.
El 1 de agosto de 1942 el Congreso del Estado autorizó, mediante la expedición de un decreto, la solicitud que con anticipación había realizado el Gral. Elpido G. Velázquez para la construcción de los edificios de las facultades del Instituto Tecnológico de Durango.
PRIMER PROYECTO
La obra fue autorizada desde agosto, pero no se inició de inmediato en virtud de que se carecía de un proyecto arquitectónico adecuado.
Por ello, poco más de dos meses después fueron presentados dos proyectos para la construcción del Instituto Tecnológico de Durango, uno del ingeniero Jesús Zubiría y Campa y otro de alumnos del Instituto Juárez, ninguno de los cuales fue aceptado, proponiéndose que el propio Zubiría y Campa que se hiciera una combinación de ambas propuestas, para dar forma a un nuevo proyecto.
Seguramente ninguno de los tres proyectos satisfizo las exigencias del Gobernador, ya que para el año siguiente (1943) las obras se habían asignado e iniciado por el arquitecto Carlos Gómez Palacio y el ingeniero José Bracho.
El edificio se levantó en un terreno de diez hectáreas, que se destinó para favorecer el crecimiento futuro del Tecnológico. Las obras duraron poco menos de dos años, y para septiembre de 1944 el edificio estaba concluido. El 11 de septiembre de ese año, el secretario de Educación, Jaime Torres Bodet, inauguró el Tecnológico, aunque éste no abrió sus puertas hasta 1948, ya que se carecía de un proyecto académico.
VISIONARIO EN PROVINCIA
El nacimiento del Instituto Tecnológico de Durango se debe de manera indiscutible al tesón y trabajo del ingeniero José Gutiérrez Osornio, hombre visionario, apasionado por Durango, que se propuso y logró transformar la antigua Escuela Prevocacional de Durango en el primer Tecnológico del país.
Relata en sus memorias el propio Gutiérrez Osornio que al enterarse de la intención del Gobierno de la República de abrir los primeros tecnológicos en provincia, en Chihuahua y Guadalajara, acudió ante las autoridades de la SEP para solicitar la apertura de una institución de esta naturaleza en Durango.
Ante la negativa para realizar este proyecto, al no disponerse de los recursos programados para la ejecución de la obra, el propio solicitante contrapropuso la transformación de la Escuela Prevocacional que dirigía en Durango, para que se transformara en Tecnológico, puesto que los servicios que se prestarían en esta nueva institución, como las que se pretendían abrir en otros estados, serían de manera gradual, por lo que se requería en realidad una mínima inversión.
La tenacidad, la constancia e insistencia de Gutiérrez Osornio finalmente fructificó, y el 2 de agosto de 1948 se firmó el convenio de colaboración entre al Secretaría de Educación Pública y el Gobierno del Estado para abrir las puertas del Instituto Tecnológico de Durango, sólo que de manera inicial sólo prestaría las modalidades de vocacional y carreras cortas.
CARRERAS TÉCNICAS
A partir de la Escuela Prevocacional No. 24, el Instituto Tecnológico nació ofreciendo el servicio de vocacional, para preparar estudiantes que seguirían sus estudios superiores en las aulas del Instituto Politécnico Nacional.
Desde su nacimiento, el Tecnológico ofreció cuatro carreras técnicas cortas: las de Mecánico Tornero, Electricista Instalador Embobinador, Radio Experto y Corte y Confección; a partir de 1951 se estableció la también carrera corta de Mecánico Automotriz.
Luego de diez años de trabajo de consolidación y crecimiento de la institución, la Secretaría de Educación Pública autorizó la creación de la primera carrera técnica, entonces llamadas subprofesionales: el 2 de septiembre de 1958 abrió el primer ciclo para formar técnicos madereros industriales.
Once meses después, el 2 de agosto de 1959, se abrieron las aulas para comenzar la formación de técnicos electricistas, previo a la apertura de la carrera de Ingeniero Industrial Eléctrico. Tres años después, en 1962, se estableció la carrera de Técnico Agropecuario.
ESTUDIOS PROFESIONALES
Dos años después de creada la primera carrera técnica se inició el ciclo de licenciatura, al abrirse en 1960 la carrera de Ingeniero Industrial.
El 21 de septiembre de ese año se dio a conocer el inicio de este programa de estudios en el Tecnológico de Durango, que de nueva cuenta sería pionero en el país, al ser el primero en ofrecer este nivel académico.
La carrera de Ingeniería Industrial, a cursarse en cuatro años, requería como antecedente la vocacional o bachillerato que la propia institución ya brindaba, y ofrecía las especialidades de Eléctrica, Mecánica o Química.
La primera generación estuvo integrada por 24 alumnos que iniciaron sus estudios ese mismo año, de los cuales cuatro años después en 1964 egresaron 17. Desde entonces, por las aulas del Tecno han egresado más de cinco mil profesionistas de su siempre creciente oferta educativa.
Diez años después, en 1970, se crearon las carreras de Ingeniería Industrial en Electrónica y en Producción; en 1975 se iniciaron los estudios de Ingeniería Civil; en 1979 los de Informática e Ingeniería Bioquímica; en 1991 los de Ingeniería en Sistemas Computacionales; en 1994 los de Arquitectura, y en 1996 los de Administración.
FORMACIÓN DE POSGRADO
El Tecno fue también pionero de los estudios de posgrado en el estado de Durango.
El 14 de febrero de 1977 inició el primer ciclo de este nivel, con una maestría en Planificación Industrial. Desde entonces se han creado nuevas maestrías, acorde a los requerimientos del desarrollo regional.
Un elemento fundamental para la consolidación del posgrado fue sin duda la creación del Centro Regional de Estudios de Graduados e Investigación Regional (CREGIT), ahora División de Estudios de Posgrado e Investigación.
Este Centro, inaugurado el 2 de agosto de 1978, se ubicó en el antiguo edificio que se había construido para los laboratorios de Química, Física y Biología, el cual fue remodelado y acondicionado para sus nuevas funciones.
El 21 de agosto de 1995 el entonces gobernador del estado, Maximiliano Silerio Esparza, puso en macha el primer programa de doctorado en el estado: se trató del Doctorado en Ciencias en Ingeniería Bioquímica, que ofrece el Tecnológico con un muy alto nivel académico.
VINCULACIÓN EFECTIVA
El Centro de Graduados surgió para hacer efectiva la formación de recursos humanos altamente especializados académica, científica y tecnológicamente, para impulsar el desarrollo de la industria regional y del país.
El 11 de agosto de 1994 se registró la primera patente industrial derivada de la investigación que desde 1992 fue impulsada por los investigadores del Tecnológico, desarrollada en la Unidad de Biotecnología, a favor del desarrollo de la industria regional, con el apoyo de la compañía minera Luismin.
DEPORTE DE EXCELENCIA
Desde su fundación, el Tecno se ha caracterizado por su promoción de la actividad deportiva, elemento fundamental para el desarrollo integral de los estudiantes. En sus campos deportivos se han forjado campeones nacionales en diversas especialidades y disciplinas.
El Tecno tuvo desde el principio su equipo más representativo: los Burros Blancos en el futbol americano, los cuales practicaban en los campos abiertos de la institución, hasta que se inició la construcción del estadio en 1952, con el apoyo de la tropa militar destacamentada en Durango. En 1969 se construyó el casillero para el equipo, para luego contar con su propio campo de entrenamiento.
En 1957 se construyó la alberca semiolímpica, con su área de calderas; en 1959 fue la cancha de futbol y cinco años después se inició la edificación de las graderías. En 1973 se puso en servicio el gimnasio, restaurado integralmente en 1990. La ampliación de diez hectáreas más para las instalaciones del Tecno al norte del bulevar Felipe Pescador le han permitido a la institución contar con el espacio suficiente para el desarrollo de sus instalaciones deportivas.
Ahora cuenta, además, con varias canchas mixtas, dos campos de futbol, uno de beisbol, otro de futbol rápido, uno de softbol y dos canchas de tenis. En 1993 se construyó el frontón. En 1994 se logró la modernización total de la pista atlética; en 1997 se construyó el Centro de Capacitación para Boxeo Amateur.
Los atletas del Tecno han descollado en el ámbito nacional e internacional en voleibol, natación, futbol americano, ajedrez y en las diversas pruebas de pista y campo de atletismo. Los Juegos Intertecnológicos, que periódicamente se realizan, son un escaparate real del alto desarrollo deportivo del Tecnológico de Durango.
FRUTOS
Patrimonio cultural
Además de los resultados académicos del ITD, hay otros logros dignos de resaltarse.
*Radio FM. El Tecno fue el pionero en Durango en la transmisión de radio en frecuencia modulada (FM). La estación XHITD Estéreo Tecnológico transmite desde el 4 de abril de 1990 en el 92.1 del cuadrante, gracias al trabajo y la pasión de Jorge Herrera Delgado, egresado de la institución, quien ha impulsado y sostenido la operación de la radiodifusora.
*Pinturas murales. En las diversas instalaciones del Instituto se conservan varias pinturas murales que han realizado artistas de la localidad. En los jardines exteriores en el edificio “S”, localizado a la derecha de la entrada principal, se encuentra la obra de mayores dimensiones en la institución, realizada en acrílico por Luis Gustavo Sandoval y José L. Gómez G., terminada en enero de 1979. Un año antes, el propio Luis Gustavo Sandoval realizó otro mural, el óleo sobre tela “La técnica al servicio de la patria”, ubicado en la escalera del edificio de la Dirección.
En el Centro de Información, se conservan dos pinturas murales en acrílico, una realizada por Jorge Quiñónez en 1984 y otra más, dirigida por la maestra Martha Espinosa en 1988.
*Esculturas. En ocasión de la celebración del 30 aniversario del Tecnológico de Durango, se encargó al maestro Federico Cantú la elaboración de una estela conmemorativa del Sistema Nacional de Tecnológicos. La obra develada el 2 de agosto de 1978 es una espléndida talla en mármol blanco, enmarcada en una fundición de bronce que se integra perfectamente.
En la calle interior que lleva a la unidad administrativa, junto a la pista de atletismo, encontrará una escultura moderna, instalada en 1977, que fue realizada a partir de una antiguo cigüeñal de la termoeléctrica de Durango.
En la portada del edificio principal se elaboró en 1944 un altorrelieve en dos paneles de cantera de gran calidad, éstos representan la industria regional, los bosques, los aserraderos, la mecánica, el Cerro de Mercado, el trasporte y las ciencias biológicas, en referencia a las especialidades que se pretendían desarrollar en la institución.
FUENTE: Investigación de Javier Guerrero Romero.
ATENCIÓN
Para muy observadores
Cuando visite el ITD ponga atención y busque los elementos siguientes:
*En el acceso principal, el edificio conocido como “A”, que es también el primero que se construyó en 1944, se encuentra grabado en el dintel del marco de acceso las firmas de los constructores: el Ing. Jesús Bracho y el Arq. Carlos Gómez Palacio. ¿Podrá localizarlas?
*En el corredor principal del edificio “A”, entre las varias placas de bronce conmemorativas, se encuentra una con el nombre de los 17 egresados de la primera generación de Ingeniería Industrial.
FUENTE: Investigación de Javier Guerrero Romero.
CÓMO LLEGAR
El Instituto Tecnológico de Durango se encuentra en un gran predio al oriente de la ciudad, perfectamente comunicado.
Para llegar desde la Plaza de Armas, siga al Norte una cuadra hasta la calle Negrete, doble en ésta a la derecha y siga por varias cuadras, hasta llegar al acceso principal de la institución.
¿SABÍAS QUE...?
... Cuando se concluyó el edificio del ITD (1944), el Gobernador lo ofreció al entonces Instituto Juárez para que impulsara las carreras tecnológicas, pero los universitarios lo rechazaron porque consideraban que se encontraba “demasiado lejos en la ciudad”.
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