¿Sabías que en general los anuncios de juguetes que pasan por la tele se valen de muchos trucos para que los quieras y se los pidas a tus papás, al Niño Dios o a los Reyes Magos? Por eso no te dejes engañar.
Los magos experimentados –como tú claro- aprenden a reconocer los trucos, no importa dónde aparezcan: ya sea en el periódico, en revistas, en los centros comerciales, en el cine o en la televisión; siempre identifican los hechizos.
Aquí encontrarás cuáles son las fórmulas secretas que se usan en algunos comerciales de televisión para hechizar a la gente. Conócelas, ¡y aprende a pensar por ti mismo!
¿Has visto esos comerciales de increíbles autos de juguete que lanzan enormes chorros de agua, o los “hombres de acero” que enfrentan a los malvados con acciones que nunca ocurren si en la realidad tú no los mueves y te imaginas todo eso? ¿Has visto esas muñecas que son muy tiesas, pero aparecen en la tele haciendo ejercicio o bailando solas? ¿Te has fijado en que algunos productos como cereales, chocolates y paletas casi siempre aparecen
más grandes de lo que normalmente son, y a veces con colores que nunca tienen las golosinas reales?
Los comerciales de la televisión están hechos para animarte a comprar los productos que anuncian. Son hechizos muy caros, cuesta mucho dinero grabarlos y se emplean trucos sorprendentes que se consiguen con ciertos enfoques de las cámaras, con animación (como en las caricaturas), con efectos de sonido y filmando movimiento por movimiento de los muñecos y los actores, y pegando después esas imágenes para que parezcan absolutamente reales.
Algunos comerciales son realmente estupendos, pero lo que prometen no siempre es verdad. ¡No te dejes hechizar! Por ello, sigue estos tips:
-Mucho ojo. Toma en cuenta que los emocionados protagonistas actúan para que los televidentes quieran tener el mismo juguete. Muchas veces la cámara se acerca tanto al producto, que parece enorme, cuando en realidad no lo es.
-Para la oreja. Pon mucha atención a la música, ya que ésta sirve para recrear la animación que el juguete necesita. Si bajas el volumen de la televisión cuando observes los anuncios, podrás darte cuenta que el efecto no será el mismo.
-Mira hasta el cansancio. Observa los comerciales varias veces. Esto te permitirá no dejarte llevar por la emoción de las imágenes.
-Lee los letreritos. No olvides que los anuncios se trasmiten tan rápido, que no da tiempo de que leas las leyendas como “no incluye baterías” o “los accesorios se venden por separado”.
TÚ ERES EL BLANCO
Tú eres el blanco de mucha publicidad, adonde quiera que vayas encontrarás muestras de que los publicistas están pensando en ti.
Debes saber que la TV no sólo ofrece, sino que impone experiencias e ideas, para que los niños –el blanco principal- influyan en el consumo de los mayores.
La publicidad está orientada a difundir la existencia de un producto y a promover que lo compres. En la actualidad, las niñas y los niños aparecen en la publicidad como los protagonistas que son felices gastando y teniendo lo que se vende; lo malo de esto es que muchos pequeños son tratados como objetos publicitarios y no como personas.
Así, los niños se convierten en el puente para llegar a los adultos, es decir, se les induce para presionar a los padres en el consumo de productos y servicios; este vínculo es el que el comercio explota y aprovecha al máximo.
Finalmente, la publicidad puede ser nociva para los niños porque los manipula a través de imágenes y formas de presentar los productos, provocando deseos y, por tanto, haciendo que exijan a sus padres que se los compren.
ATENCIÓN
Conoce tus derechos
Debes saber defenderte del bombardeo publicitario, que busca que quieras todo lo que sale en la tele. Tú eres también un consumidor, por eso debes conocer tus derechos:
1. Derecho a la información.
2. Derecho a la educación.
3. Derecho a elegir.
4. Derecho a la seguridad y calidad de bienes y servicios.
5. Derecho a no ser discriminado.
6. Derecho a la compensación.
7. Derecho a la protección.
FUENTE: Profeco.
EL BALERO
En Francia se le llama “bilboquet” y en Japón “kendama”. En México y muchos países americanos, como Argentina y Uruguay, se le conoce como “balero”. ¿Alguna vez has jugado con él?
Hace muchos años –bueno, tal vez no tantos-, los niños se divertían con juegos y juguetes que hoy casi son piezas de museo: el trompo, el yoyo, las canicas y hasta huesos de chabacano para la matatena.
Estos juegos son sencillos, pero hay uno que exige más destreza y habilidad que todos: el balero, que está formado por un pedazo de madera en forma de barril, en cuya parte inferior tiene un agujero y en la superior una cuerda de unos 20 centímetros, que se amarra a un mango también de madera.
El chiste del juego es meter el mango en el agujero; a esto se le llama capirucho. En apariencia, la cosa no se oye tan complicada, sin embargo, para dominar todos los tipos de capiruchos es necesario practicar mucho. Los expertos en balero te recomiendan que la cuerda no esté demasiado enrollada y que te consigas uno de buen peso, no tan ligero.
¿Cuánto valen los capiruchos? Ahí te va:
-Recto. Es cuando se cuelga el balero y de un solo movimiento se ensarta en el mango; vale cinco puntos.
-Con giro. Si el balero da un giro y de un solo movimiento se ensarta, vale diez puntos.
-Con el mango al revés. Ensartar el balero utilizando este movimiento te dará 50 puntos.
-Volteando los papeles. En este capirucho se invierten los papeles, pues se toma el balero con el agujero hacia arriba y se deja colgar el mango, que se debe ensartar en el balero; vale 100 puntos.
Pregúntale a tu papá o a tus tíos cuáles son los capiruchos de a quinientos, de a mil y de a millón; seguro que ellos aún se acuerdan. Luego practica y hazte un experto también.
EL CICLO DEL AGUA
En esta página también se tratarán algunos temas útiles sobre ecología o temas afines; el primero es el ciclo del agua, ¿sabes cuál es?
-La evaporación. Calentada por los rayos del Sol, el agua de los océanos, ríos y lagos se evapora y sube a la atmósfera.
-La condensación. Al contacto con las capas de aire frío de la atmósfera, el vapor de agua se condensa en gotas pequeñísimas, que, empujadas por el viento, se juntan y forman las nubes.
-Las precipitaciones. Las nubes vacían su contenido sobre la tierra en forma de lluvia, nieve o granizo.
-Los escurrimientos. La mayor parte del agua cae en los océanos. El resto se filtra en la tierra o hace crecer los ríos, que van directamente al mar. Parte de esa agua se deposita en las presas y se distribuye a los ríos y canales, para usarse en la agricultura, ganadería e industria. El ciclo del agua se reinicia aquí.
LA RECETA
Chocotorta
Para los fanáticos del chocolate, aquí viene un desafío que no deben dejar pasar.
Ingredientes:
-Dos paquetes de galletas de chocolate
-Una taza chica de queso crema
-Una taza chica de dulce de leche (cajeta)
-Leche chocolatada o sola
Preparación:
-Paso 1: Pasa muy rápido las galletitas por la leche y arma una capa de galletitas en una fuente con bordes.
-Paso 2: Mezcla bien el dulce de leche y el queso crema en un recipiente y pon una capa de la mezcla sobre las galletitas.
-Paso 3: Acomoda otra capa de galletitas mojadas en la leche y unta nuevamente una capa de dulce de leche y queso crema hasta terminar con todas las galletitas. Termina con una capa de dulce de leche y queso crema. Con los dientes de un tenedor, haz dibujos sobre la capa de dulce de leche como decoración.
Paso 4: Lleva a la heladera hasta que esté bien frío y, ¡ya estás listo para sorprender a tus amigos!
FUENTE: Agencias.
LA PREGUNTA
¿Por qué tiene siete días la semana?
La Luna gira alrededor de la Tierra y tarda 28 días, más o menos, y durante este tiempo se muestra de cuatro formas distintas. Dividiendo 28 entre 4, se obtiene 7 días, o sea, una semana.
Los hebreos le añadieron un significado místico a esta división: los seis primeros días están ligados a la creación del mundo y el sétimo al reposo o “sabat”.
En Roma, durante el imperio de Augusto, se adoptó definitivamente la semana y se consagró cada día a una divinidad, de las cuales en cierta forma se conservan los nombres: Luna, Marte, Mercurio, Júpiter, Venus, Saturno. El domingo es el Día del Sol, consagrado a Dios en los ritos cristianos.
PARA TERMINAR
¿Qué es un consumidor? Todos los que contratan –usan- un servicio o compran algo para usarlo o regalarlo, y también los que gozan de esos bienes, productos o servicios; todos ellos son consumidores.
Desde el bebé que consume pañales hasta el abuelito que compra un bastón. Tú también, cuando vas a la tienda y compras dulces. Es decir, ¡todos son consumidores!
Por eso pon atención: cada último martes de mes la sección de Kiosko dedicará esta página para ti, que eres ya un consumidor también o que influyes en el consumo que hacen tus padres.
En ella podrás encontrar algunas sugerencias y actividades sencillas para desarrollar en tu casa.
Recuerda: consumir con inteligencia es algo que todos deben aprender.