CD. LERDO, DGO.- El Museo de Francisco Sarabia será el único museo de su tipo en Latinoamérica, donde se relate a través de fotografías y filmes la historia de la aviación para culminar en el “Aguilucho” de Lerdo.
Amílcar Ornelas Lozano, regidor comisionado en Arte y Cultura, refiere que, del Ramo 33, ya hay dos millones de pesos asignados al proyecto, que serán el inicio de la remodelación para el nuevo museo.
Manifiesta que Francisco Sarabia Tinoco es el héroe local del municipio y el museo que Lerdo le dedica es lo primero que la gente encuentra al visitar la Ciudad Jardín. En la Dirección de Obras Públicas se elabora el análisis de resistencia e impacto del suelo.
“Recibimos el avión en condiciones muy lamentables, estaba cerrado, sin personal, al hangar le faltaban algunas láminas, la lluvia se filtraba y tenía algunos vidrios rotos”, comenta; “es urgente que se construya un lugar que dure unos 30 a 40 años porque el museo ahorita es de lámina”.
De los modelos que se han presentado, el más viable coloca al avión de Sarabia sobre un suelo transparente y alrededor, una rampa en caracol que sube a un segundo piso. Conforme el observador avanza en la escalinata, hay fotos alusivas a la historia de la aviación que culminan en la vida del “Aguilucho” de la Ciudad Jardín.
Ornelas Lozano explica que, dentro de este modelo, se pretende que exista un piso bajo el avión, para que el observador pueda mirarle a través del suelo transparente, similar al que existe en el Museo del Desierto, en Saltillo, y en la parte baja se colocará una sala audiovisual con recepción, mientras que arriba habrá una exposición permanente de fotografías.
Mariana Garza Salas, jefa de Planeación y Proyectos en Obras Públicas, señala que aún no se tiene un presupuesto del monto que alcanzará la remodelación del Museo de Sarabia, pues se pretende incluso restaurar el avión.
Explica que el proyecto ha despertado el interés del presidente de la Asociación Aeronáutica de América Latina, Aldo Flores, quien ha estado al pendiente de los avances y pudiera colaborar con el Ayuntamiento en la búsqueda de asociaciones para obtener patrocinios.
“Es un proyecto muy ambicioso, no se quiere mover la estructura del avión porque no se sabe cómo esté, se va a sacar en grúa por vías no muy transitadas para guardarlo en una hacienda”, dice la arquitecta.