Las hemorroides
La hemorroides (almorranas) son probablemente la enfermedad más corriente de todas las que afectan al conducto gastrointestinal. Básicamente, una hemorroide es una vena dilatada acompañada de coagulación de sangre o trombo. Los nódulos repletos aparecen tensos, dolorosos y punzantes, especialmente cuando están inflamados; el ano no cierra herméticamente, saliendo mucosa y contenido intestinal líquido del interior, lo que modifica de modo patológico la piel de las proximidades del ano. Si las heces son duras, retenidas, pueden reventar las hemorroides a su paso, de modo que empiezan a sangrar y se forman tumoraciones y desgarros en lugar de los nódulos. Debido a la presión de las heces duras, los nódulos se hacen cada vez mayores. Finalmente, puede desangrarse incluso la mucosa intestinal. Las tumoraciones descuidadas pueden llevar a la formación de fístulas.
Si las molestias hemorroidales no son tratadas rápida y correctamente, se produce una várice anal, con la consiguiente dificultad de defecación.
Causas
La causa de las hemorroides son las estasis del reflujo venenoso como consecuencia de reacciones inflamatorias. Todo aquello que impida la circulación en la cavidad abdominal y en la pelvis, estimula por lo tanto, la formación de las hemorroides: embarazo, vida sedentaria, pies fríos crónicos, estreñimiento, inflamaciones de los órganos del bajo vientre, tumores en la cavidad abdominal, dolencias hepáticas y cardíacas. Según el estado circulatorio de la cavidad abdominal, las hemorroides pueden presentarse y desaparecer de nuevo.