El desayuno es el alimento más importante del día, dicen los médicos expertos. Y sin duda así es. Por eso es muy importante realizar una alimentación a cualquier edad y mucho más en los niños. Con el regreso a clases, los niños nuevamente dependen de lo que les preparen en casa. Hacer unos buenos hábitos desde pequeños es indispensable en su crecimiento y rendimiento escolar. Es necesario que se preparen una loncheras con mucho sabor y bajas en grasa, que incrementen su energía y controlen su peso.
“Entre los beneficios que aportan el desayuno y el lonche en los niños, se encuentran que el cerebro cuenta con combustible necesario para funcionar con normalidad, ya que un pequeño mal nutrido tiene problemas de atención y falta de energia”, según dicen expertos del sitio bbmundo.com. Además, los pequeños se van formando buenos hábitos alimenticios y así se evita que consuman comida “chatarra”, que no los nutre para nada.
Antes de elegir un buen menú para la lonchera de su hijo, recuerde que debe prepararle algo que le agrade totalmente a él; de otra manera, lo más seguro es que regale en la escuela lo que preparó y optará por comer frituras y dulces.
Los sitios electrónicos informan que entre los tres y los seis años de edad, los niños aumentan alrededor de dos kilos y crecen cerca de seis centímetros cada año, por lo que hay un crecimiento desacelerado. Esa situación incentiva a los pequeños a comer más por hambre que por apetito.
Por su parte, el sitio de Discovery en español asegura que las mezclas divertidas siempre son el gancho ideal para los niños, sobre todo cuando se trata de comer verduras. No se puede olvidar que un menú saludable contiene los cinco grupos esenciales de alimentos: frutas, vegetales, granos, carnes y lácteos. La lonchera debe incluir, en el caso de los niños de dos a cuatro años, verduras en diversas ocasiones durante una semana y no necesariamente todos los días. Sin embargo, en el caso de los más grandes o adolescentes, es necesario nutrirse de todos los grupos diariamente.
Especialistas del sitio electrónico de bbrevista.com anotan que el mejor ejemplo se da en casa. Mientras los papás tengan buenos hábitos, los hijos los adoptarán. Como recomendación, deben revisar el menú de la semana juntos y hacerlo de manera divertida; será la mejor opción para guiarlos por el camino de la nutrición.