Los agujeros son inevitables en las paredes, y si vamos a pintar o remodelar una habitación, lo mejor es hacerlos desaparecer.
Los agujeros son inevitables en las paredes, y si vamos a pintar o remodelar una habitación, lo mejor es hacerlos desaparecer.
Al cambiar muebles de lugar o querer darle un aspecto diferente a un determinado ambiente, nos encontramos con numerosos agujeros en la pared.
La solución para que desaparezcan: taparlos. (Se dice fácil, ¿verdad?).
Esta tarea es muy sencilla de realizar y la puede llevar a cabo cualquier habitante de la casa; en este caso el habitante disponible y técnicamente preparado eres tú.
La solución más común es taparlos con enduído plástico, un producto que se puede adquirir en cualquier ferretería o casa de pinturas. Los pintores lo usan para tapar agujeros o eliminar algunas imperfecciones antes de pintar.
Para tapar un agujero con enduído, procedemos a rellenarlos con una espátula, estaquilla, etc. Luego hay que esperar que se seque bien y por último lijar con una lija suave; así lograremos que no se note ninguna diferencia entre la pared y el agujero tapado.
Si no tenemos enduido, también se pueden tapar con yeso, con el mismo procedimiento anterior.
El enduído plástico y el yeso también son útiles para tapar y disimular pequeñas grietas.
Usando el mismo procedimiento que con los agujeros: rellenamos la grieta, esperamos que se seque, lijamos y pintamos. La pared queda→ rá como nueva.