Un juez federal ordenó el arraigo por 40 días en contra de los presuntos operadores del Cártel de Sinaloa, Manuel García Simental, "El Chiquilín" y Rayde Rosalío López Uriarte, "El Muletas". La medida cautelar incluye a otros 11 supuestos integrantes de su organización, entre los que están cinco policías que presuntamente formaban parte de su red de protección.
La Procuraduría General de la República (PGR) dio a conocer la resolución judicial contra estos supuestos narcotraficantes que son señalados como los encargados del trasiego de droga en Tecate, Tijuana y Ensenada, Baja California, y que estaban encargados de las células de la organización tras la detención del capo Teodoro García Simental, "El Teo".
La aprehensión de "El Chiquilín" y "El Muletas" se realizó el 9 de febrero pasado en la Paz, Baja California, y derivado de sus declaraciones, en las que aseguraron que "contaban con la complicidad de varios jefes y subjefes de la policía municipal de Tijuana", al revelar sus nombres, se procedió a la captura de integrantes de la red de protección.
También fueron arraigados Ramón Ángel Soto Corral, comandante de la policía municipal de Tijuana; los ex militares Francisco Ortega Zamora, jefe de distrito en la delegación El Centenario, y Juan Carlos Cruz Espinoza, subjefe en el distrito de La Mesa; así como los policías José Enríquez Ramírez Zambrano y Macario Arturo Enríquez quienes serán investigados para determinar sus presuntos nexos con el Cártel de Sinaloa y la célula que lideraba "El Muletas".
Otros seis sujetos identificados como el ex agente ministerial Daniel Macías Cebreros, Gregorio Cesaña Chávez, Raymundo García García, Ernesto Cisneros Fiscal, Gregorio Cesaña Chávez y José Antonio Rangel Casas, también quedaron bajo arraigo.