El consumo de pescado y marisco durante el embarazo es recomendable por la cantidad de nutrientes que aporta a la mujer embarazada y, por lo tanto, al feto.
Los pescados y mariscos contienen ácidos grasos omega-3, proteínas, vitaminas y minerales. Está comprobado que su consumo durante el embarazo es beneficioso para el desarrollo del feto, sin embargo, es necesario tomar algunas precauciones.
Según estudios realizados en mujeres embarazadas y sus hijos, consumir pescado 2 ó 3 veces por semana durante el embarazo es bueno para el desarrollo neurológico del niño, ya que le hace ser más inteligentes, con más capacidad motora, mayor capacidad de memoria y mejor expresión verbal.
Mercurio y Pescado
Algunas especies de pescado como el pez espada, pez emperador, tiburón, bonito, caballa y atún, contienen mercurio de metilo, el cual puede ser dañino para el feto.
El mercurio es una neurotoxina que afecta el sistema nervioso y que traspasa la barrera de la placenta y la hermatoencefálica. Aún así, el consumo de pescado durante el embarazo no debe de eliminarse, sino reducirse a una vez por semana si contiene mercurio.
Algunos consejos a la hora de consumir pescado y marisco durante el embarazo:
* No comer más de 3 porciones de pescado o marisco a la semana.
* No consumir pescado que contiene mercurio (como atún en lata) más de 1 vez a la semana.
* Quitarle siempre la piel al pescado.
* No consumir pescados ni mariscos crudos.
* Cocinarlo muy bien para reducir algunos contaminantes.