René Franco, más vivo que nunca
Irreverente, sarcástico y polémico, así es el René Franco de la televisión y la radio, y que hoy está de manteles largos por cumplir una década con el proyecto ‘¡Es de noche… y ya llegué!’, que conduce al lado de Karla Gómez.
Con un programa especial el pasado lunes, Franco celebró las 520 transmisiones del ‘late nigth show’ producido por el canal de televisión de paga Unicable desde 2005.
“Estoy feliz, muy feliz porque diez años en la tele son diez años. Apuestas por un proyecto de mediano y largo plazo y aquí estamos. No puedo estar más que contento y muy agradecido con el público, con los ejecutivos, con la gente de Televisa Networks y W Radio”, dijo el conductor en entrevista telefónica para El Siglo de Durango.
ADAPTARSE O MORIR
Destacó que mantenerse en el medio ha sido complicado por la velocidad con la que cambia el mundo.
“Cuando yo empecé haciendo tele aprendí a quemar negativos y pegarlos en papel color naranja, y en radio usábamos cinta de carrete, no había edición digital ni HD, imagínate a estas alturas qué tanto me he tenido que adaptar cuando ya puedo grabar audios en mi teléfono y puedo hacer radio con un códec desde él, cuando puedo hacer televisión HD con cualquier cámara y tengo que competir con chamacos que hacen televisión y la trepan inmediatamente en internet. Tienes que cambiar tus temas de producción y empezar a entender los contenidos o estás muerto y aquí estoy, no me he muerto”.
Precisamente, René Franco se siente más vivo que nunca.
“Creo que el personaje de sombrero, este hombre irreverente, polémico y sarcástico, está más vivo que nunca sobre todo porque los contenidos de las redes se acercan más a mi personaje que cuando empecé. Me gusta el sarcasmo, la irreverencia, hago prensa de espectáculos y no chismes de espectáculos, hago stand-up con colegas y colaboradores como ‘el cojo feliz’, Julio y René Sosa, Juan Carlos Escalante o Rodolfo Flores, trabajo con ellos y ellos conmigo, trabajo con las nuevas generaciones pero ese lenguaje es el que se parece más al que a mí me gusta y no es que sea un viejito hablando como los chavitos, no, me gusta ser gandalla y polémico. No los imito, así he sido siempre”.