¿Cómo se tratan las verrugas?

Las verrugas son un tipo de infección provocada por algunos virus de la familia del virus del papiloma humano (VPH). Existen más de 100 tipos de VPH. Las verrugas pueden crecer en todas partes del cuerpo: en la piel, las manos, los pies, adentro de la boca, en los genitales y en el área rectal.

Las verrugas comunes, por lo general, aparecen en las manos. Las planas aparecen en la cara y en la frente. Las genitales (condiloma) aparecen en los genitales, en el área púbica y entre los muslos. Las plantares se encuentran en los pies. Las subungueales y periungueales se encuentran debajo o alrededor de las uñas de las manos y los pies.

Las verrugas de la piel pueden transmitirse a otra persona cuando ésta las toca. También es posible tener verrugas por usar toallas u otros objetos que fueron utilizados por una persona que tenía verrugas. Las verrugas de los genitales son muy contagiosas y pueden transmitirse a otra persona durante el sexo oral, vaginal o anal.

A menudo, las verrugas desaparecen por sí solas, aunque es posible que pasen muchos meses o, incluso, años para que suceda. Sin embargo, algunas verrugas no desaparecerán por sí solas. Los médicos no están seguros de por qué algunas se borran y otras no.

Necesitan tratamiento porque son molestas, pueden sangrar y provocar dolor cuando reciben un golpe. También pueden ser embarazosas, por ejemplo, si crecen en la cara. Y además, es posible que el tratamiento disminuya las probabilidades de que las verrugas se propaguen a otras áreas del cuerpo o a otras personas.

Puedes tratar las verrugas de lugares como las manos, los pies y las rodillas poniendo ácido salicílico. Para obtener buenos resultados, debes aplicar el ácido todos los días durante varias semanas. Después de bañarte o ducharte, sécate la piel con palmaditas suaves, con una toalla. Luego aplica el producto en las verrugas.