
La muerte del Pirata de Culiacán
Hasta que surgió la noticia de que el "Pirata de Culiacán" estaría en las famosas bandas del Instituto Tecnologías de Durango (ITD) supe de la existencia de ese personaje.
Tras buscar mayor información acerca de él, encontré que su única gracia, por así decirlo, era emborracharse sin límites y hacer locuras una vez que su conciencia ya estaba nublada por el alcohol.
En las imágenes que compartía en sus redes sociales dejaba ver que le gustaba la vida de los "buchones", término que se les da en Sinaloa a los varones que tienen una vida excéntrica, generalmente ligados al narcotráfico, quienes portan ropa de reconocidas marcas, consumen mucho alcohol y por supuesto, se rodean de mujeres.
Cuando los jóvenes del ITD subieron sus videos con el Pirata, a quién acosaban para tomarse una foto con él, se despertó un sentimiento de gran pesar. Pesar por Juan Luis Lagunas, nombre del "Pirata" y quien en términos legales era un niño: apenas tenía 17 años de edad y resultaba más que obvio que estaba destruyendo su vida.
Pesar por todos los demás, los que lo celebraban, los que lo incitaban a destruirse y que incluso le pagaban para que lo hiciera.
El hecho de que lo trajeran a un plantel educativo, de los más importantes en el estado, en el que se supone hay valores, generó opiniones dividas.
En este caso, el director del Tecnológico guardó silencio, no obstante que apenas unos días atrás se había indignado por las palabras de Martha Palencia, que al final de cuentas eran sólo una opinion o una ocurrencia si así lo querían ver. En este asunto, en donde los estudiantes se divertían viendo a un joven que se hacía daño a sí mismo, no le importó tanto "el orgullo guinda".
El "Pirata" finalmente fue asesinado. Lo ejecutaron en un restaurante en Jalisco y las fotos de su cuerpo masacrado se hicieron virales. Los "memes " burlandose fueron una constante. Nunca dejó de ser un simple espectáculo.
Pero en la realidad, era un muchacho separado de su familia, cuyo cuerpo apenas ayer fue reclamado por un pariente.
Este caso debería servirnos para reflexionar qué está pasando en la sociedad de la cual formamos parte. Debería preocuparnos la deshumanización que avanza a pasos agigantados y que la vida desastrosa de un muchacho resulte algo "divertido". ¿En realidad no nos preocupa?
PUNTO Y APARTE. Aprovecho la ocasión para desearle una Feliz Navidad en compañía de sus seres queridos. Esperemos que las fiestas transcurran sin contratiempos, sin hechos sangrientos por lamentar.
Twitter: @citlazoe