
¿Quién es Hernando Name?
Hace poco más de una semana concluyó la novena edición del Festival del Nuevo Cine Mexicano de Durango en el que resultó ganadora la cinta ‘Extraño pero verdadero’ del realizador Michel Lipkes. Pero hubo más figuras que destacaron este año, entre ellas el productor, director, stuntman, guionista y actor duranguense, Hernando Name.
Su nombre no era muy conocido entre las nuevas generaciones hasta hace poco. El cineasta recibió una estrella en el Corredor Constitución, un reconocimiento que también se le ha otorgado a otras celebridades que han contribuido en la industria cinematográfica del estado, entre ellas Dolores del Río, Salma Hayek, Penélope Cruz, John Wayne, el ‘Indio’ Fernández, Jack Nicholson, María Félix, Anthony Quinn y Richard Harris, entre otras.
¿Quién es realmente Hernando Name y cuál ha sido su aportación para la ‘tierra del cine’?
PRIMEROS PASOS
Hijo del libanés Pablo Name Harb y la tepehuana María Vázquez, nació en la Hacienda de Tapona (hoy la ciudad Guadalupe Victoria, Durango) el 6 de febrero de 1939. Creció en el poblado Antonio Amaro y tiempo después se trasladó a la cabecera municipal.
Ahí, en el ‘Cinema Ideal’ vio su primera película, una de charros y ese fue el inicio de todo.
Hernando Pablo Name Vázquez se ha hecho de una trayectoria en el Séptimo Arte que muchos envidiarían. Al cambiar de residencia a la capital del estado, debutó en el cine western con una breve participación en ‘Pluma Blanca’ (1954), primera película filmada en Durango bajo la dirección de Robert D. Webb y protagonizada por Robert Wagner y Debra Paget. Desde ahí han sido mas de 60 años de camino profesional que se reflejan en un acervo de 108 cintas nacionales y extranjeras en las que ha trabajo como actor, director o productor.
Tuvo la oportunidad de dirigir a artistas como Narciso Busquets, Mario y Fernando Almada, Víctor Junco, Hugo Stiglitz, Susana Dosamantes, Diana Golden, Eric del Castillo y Diana Ferreti, entre otros; como stuntman dobló a personalidades como Brigitte Bardot y Audrey Hepbutn.
Entre sus películas destacan ‘Muerte en Tijuana’ (1991), ‘La muerte cruzó el río Bravo’ (1984) ‘El placer de la venganza’ (1988), ‘Garra de Tigre’ (1989), ‘Fiera Solitaria’ (1987), ‘Rosa de la frontera’ (1985) y ‘Toña Machetes’ (1985).
‘EL CENTAURO DEL CINE’
El licenciado en Derecho Gilberto Jiménez Carrillo y el cronista e historiador José de la O Holguín lo nombran ‘El Centauro del Cine’ en su reciente publicación ‘Hernando Name’, un libro que recopila la biografía, anécdotas y trayectoria del realizador en 325 páginas.
“Hubiera sido imperdonable no plasmar la inagotable trayectoria de un ser humano que nunca trabajó pensando en convertirse en profeta en su tierra, sino para realizarse como persona y para darle satisfacción a sus padres, hermanos e hijos; y finalmente para consagrarse con el amor de su vida: el cine”, comparten los escritores en el mensaje inicial de la obra que se presentó durante el homenaje en el 9° FCM.
En dicha obra, Name se define como “un hombre de carne y hueso con defectos y virtudes, cuya sola pretensión es dejar un legado que sirva de provecho a las presentes y futuras generaciones” y eso lo dejó en claro con su mensaje a los jóvenes el día de la ceremonia, a quienes les pidió jamás dejar de filmar.
“Fui un hombre que hizo u carrera a base de esfuerzo y con los arrestos suficientes para marcharse de Durango dispuesto a destacar en México, dejando familia y amigos. Fui y conquisté la industria del cine nacional: me hice de un nombre en el medio artístico y todo mundo supo quién era Hernando Name, un hombre orgullosamente egresado de la Real y Pontificia Academia de Chupaderos”, agrega en el libro.
CINE PARA LA GENTE
Con la cantidad de filmes y el trabajo que ha realizado al lado de importantes figuras, cualquiera podría pensar que Hernando tenía la mira en Hollywood, pero no fue así. Él solo hace cine para la gente sin pensar en la fama. Hace cine porque quiere.
“Afortunadamente yo nunca hice obras de arte, porque si las hubiera hecho ¿Dónde las comerciaría? Mis caballos no entienden de Hollywood, ni de computadoras, ni de festival de Cannes, mis caballos y yo entendemos que necesitamos hacer películas para que la gente asista a verlas, que necesitamos películas para que el público las vea y no los jueces”, reflexiona entre las letras de Jiménez Carrillo y De la O Holguín.
Es así que se hizo de una estrella colocada en el Corredor Constitución y esquina con calle Pino Suárez, un pequeño homenaje para un grande de la industria que quiere seguir labrando ‘la tierra del cine’ y que se despide de los lectores de ‘Hernando Name’ con su muy peculiar estilo: “Cuando llegue el irremediable final de la jornada, montaré mi mejor caballo y cabalgaré en busca de quien un día me soltó las alas y dejó volar la inquieta imaginación de un joven que un día soñó con ser Director de Cine, y llegado el momento... mi epitafio rezará: ¡Aquí descansa un vaquero que se le cansó el caballo!”.