Deportes

El Madrid es el campeón

El Madrid es el campeón

El Madrid es el campeón

EFE

El Real Madrid, que no pudo celebrar hace dos campañas la consecución de LaLiga Santander a causa del Covid-19, se reencontró con la diosa Cibeles para celebrar por fin junto a su afición, esta vez su trigésimo quinto título en el torneo de la regularidad y, de paso, a convencerse en conjunto de remontar el próximo miércoles al Manchester City y alcanzar la final de la Liga de Campeones.

Todo estuvo esta vez a favor de la celebración. El equipo de Carlo Ancelotti necesitaba un punto. Lo logró sobrado, con goleada al Espanyol. El clima acompañaba y la hora del encuentro era más que adecuada para posteriormente tener tiempo para encontrarse con la afición y con la familia, compañeros y amigos para festejar con mesura.

No en vano el miércoles está ya a la vuelta de la esquina. El cuadro madridista retornará este mismo domingo a los entrenamientos en la ciudad deportiva de Valdebebas para comenzar a preparar la visita del City, que llegará al Bernabéu con un 4-3 logrado en el Etihad.

FESTEJO

En el Bernabéu se festejó por todo lo alto el trigésimo quinto título de liga, con la afición y con las familias. Pero también había ganas de volver a Cibeles, donde no se iba desde hace cuatro años a causa de la pandemia. Lejos de abortar el traslado ante la diosa, como anunció Ancelotti, era necesario celebrar para incrementar la comunión con la afición y la moral y confianza ante el reto de la Champions ante el poderoso conjunto de Pep Guardiola

El autobús partió desde el coliseo blanco con el lema de 'Campeones', siempre rodeado por un gentío espectacular, cada vez más numeroso según el vehículo bajó por el Paseo de la Castellana hacia la plaza de Cibeles, donde los seguidores se comenzaron a apostar nada más concluir el choque contra el Espanyol.

El trayecto, que habitualmente es corto, duró casi una hora. Presidía en lo alto del autobús descapotable el trofeo que Luis Rubiales, presidente de la RFEF, entregó al brasileño Marcelo y al francés Karim Benzema, los capitanes, en el palco del Bernabéu. La copa estaba perfectamente sujeta por unas cintas a una plataforma para que no hubiera peligro de caída, como le ocurrió a Sergio Ramos con la Copa del Rey hace unos años.

Los jugadores festejaron en lo alto del autocar junto a los seguidores que bordeaban el trayecto y los que le acompañaban caminando, pero el delirio se produjo cuando llegó a la plaza de Cibeles a las 20.47, donde esperaban varias decenas de miles de hinchas enfervorizados.

MARCELO Y BENZEMA RECIBEN LA COPA

Los capitanes del Real Madrid Marcelo y Karim Benzema, recibieron en el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu la copa de campeón de LaLiga, conquistada con la goleada al Espanyol, que dio paso a la celebración en el estadio de la que se ausentó Gareth Bale.

La tarde de celebración de la trigésimo quinta Liga conquistada por el Real Madrid se inició en un Bernabéu tan lleno como permitieron las obras de su remodelación. Nada más acabar el partido, sobre el césped se desató la fiesta, con un escenario montado en segundos.

El brasileño Marcelo y el francés Karim Benzema fueron los encargados de hacer el camino desde el césped al palco de honor, donde recibieron de manos del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, el trofeo de Liga. Tras levantarla juntos por primera vez, con los compañeros esperando en el centro del campo, todos juntos la alzaron al cielo de Madrid con la pasión en las gradas.

A la fiesta, en comunión continua de jugadores con afición, faltó Bale. A última hora del viernes causaba baja por unas dolencias en la espalda de las que no se publicó parte médico, como es habitual con el gales, que no acudió al Bernabéu a presenciar el partido ni a la celebración.

Escrito en: Liga de España Real Madrid Champions League Bernabéu, Real, Madrid, celebrar

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Deportes

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas